Encontrados 52 resultados para: puedo

  • ya ves que Ragüel me ha conjurado, y que no puedo desatender su deseo.» Rafael se puso en camino para Ragués de Media con los cuatro criados y los dos camellos y fueron a pernoctar en casa de Gabael. Le presentó el recibo y le dio la noticia de que Tobías, hijo de Tobit, se había casado y le invitaba a la boda. Gabael se levantó, le entregó todos los sacos de dinero, con los sellos intactos, y los cargaron sobre los camellos. (Tobías 9, 5)

  • Corrió Ana y se echó al cuello de su hijo, diciendo: «¡Ya te he visto, hijo! ¡Ya puedo morir!» Y rompió a llorar. (Tobías 11, 9)

  • Respondió Tobías: «Padre, ¿qué salario puedo darle? Aun entregándole la mitad de la hacienda que traje conmigo, no salgo perdiendo. (Tobías 12, 2)

  • Alguien surge... no puedo reconocer su cara; una imagen delante de mis ojos. Silencio..., después oigo una voz: (Job 4, 16)

  • Puedo contar todos mis huesos; ellos me observan y me miran, (Salmos 22, 18)

  • Y ahora, Señor, ¿qué puedo yo esperar? En ti está mi esperanza. (Salmos 39, 8)

  • Pues desdichas me envuelven en número incontable. Mis culpas me dan caza, y no puedo ya ver; más numerosas son que los cabellos de mi cabeza, y el corazón me desampara. (Salmos 40, 13)

  • Los párpados de mis ojos tú retienes, turbado estoy, no puedo hablar; (Salmos 77, 5)

  • Desdichado y agónico estoy desde mi infancia, he soportado tus terrores, y ya no puedo más; (Salmos 88, 16)

  • Ciencia es misteriosa para mí, harto alta, no puedo alcanzarla. (Salmos 139, 6)

  • Toda revelación será para vosotros como palabras de un libro sellado, que da uno al que sabe leer diciendo: «Ea, lee eso»; y dice el otro: «No puedo, porque está sellado»; (Isaías 29, 11)

  • ¿No puedo hacer yo con vosotros, casa de Israel, lo mismo que este alfarero? - oráculo de Yahveh -. Mirad que como el barro en la mano del alfarero, así sois vosotros en mi mano, casa de Israel. (Jeremías 18, 6)


“Esforce-se, mesmo se for um pouco, mas sempre…” São Padre Pio de Pietrelcina