Encontrados 50 resultados para: pocos

  • Jacob dijo a Simeón y a Leví: «Me habéis puesto a malas haciéndome odioso entre los habitantes de este país, los cananeos y los perizitas, pues yo dispongo de unos pocos hombres, y ellos van a juntarse contra mí, me atacarán y seré aniquilado yo y mi casa.» (Génesis 34, 30)

  • Respondió Jacob a Faraón: «Los años de mis andanzas hacen 130 años: pocos y malos han sido los años de mi vida, y no han llegado a igualar los años de vida de mis padres, en el tiempo de sus andanzas.» (Génesis 47, 9)

  • Si faltan pocos años hasta el jubileo, se le calculará en proporción a ellos, y lo pagará como rescate, (Levítico 25, 52)

  • Soltaré contra vosotros las fieras salvajes, que os privarán de vuestros hijos, exterminarán vuestro ganado y os reducirán a unos pocos, de modo que vuestros caminos queden desiertos. (Levítico 26, 22)

  • En cambio, si la Nube estaba sobre la Morada pocos días, a la orden de Yahveh acampaban y a la orden de Yahveh partían. (Números 9, 20)

  • Yahveh os dispersará entre los pueblos y no quedaréis más que unos pocos, en medio de las naciones adonde Yahveh os lleve. (Deuteronomio 4, 27)

  • Tú pronunciarás estas palabras ante Yahveh tu Dios: «Mi padre era un arameo errante que bajó a Egipto y residió allí como inmigrante siendo pocos aún, pero se hizo una nación grande, fuerte y numerosa. (Deuteronomio 26, 5)

  • No quedaréis más que unos pocos hombres, vosotros que erais tan numerosos como las estrellas del cielo, por haber desoído la voz de Yahveh tu Dios. (Deuteronomio 28, 62)

  • ¡Viva Rubén y nunca muera, aunque sean pocos sus nombres! (Deuteronomio 33, 6)

  • Volvieron donde Josué y le dijeron: «Que no suba toda la gente; para atacar a Ay basta con que suban dos o 3.000 hombres. No molestes a toda la gente haciéndoles subir hasta allí, porque ellos son pocos.» (Josué 7, 3)

  • Jonatán dijo a su escudero: «Ven, crucemos hasta la avanzadilla de esos incircuncisos. Acaso Yahveh haga algo por nosotros, porque nada impide a Yahveh dar la victoria con pocos o con muchos.» (I Samuel 14, 6)

  • Pero como los sacerdotes eran pocos y no bastaban para desollar todos estos holocaustos, les ayudaron sus hermanos los levitas, hasta que terminaron la labor, y los sacerdotes se santificaron, pues los levitas estaban más dispuestos que los sacerdotes para santificarse. (II Crónicas 29, 34)


A firmeza de todo o edifício depende da fundação e do teto! São Padre Pio de Pietrelcina