Encontrados 125 resultados para: número

  • La vida del hombre tiene días contados, mas los días de Israel no tienen número. (Eclesiástico 37, 25)

  • De igual modo el alfarero sentado a su tarea y dando a la rueda con sus pies, preocupado sin cesar por su trabajo, toda su actividad concentrada en el número; (Eclesiástico 38, 29)

  • piedras preciosas, grabadas como sellos, en engaste de oro, obra de joyero, para memorial por la escritura grabada, según el número de las tribus de Israel; (Eclesiástico 45, 11)

  • ¿Se olvida la doncella de su aderezo, la novia de su cinta? Pues mi pueblo sí que me ha olvidado días sin número. (Jeremías 2, 32)

  • Este es el número de los deportados por Nabucodonosor. El año séptimo: 3.023 de Judá; (Jeremías 52, 28)

  • «Si no escucháis mi voz, esta misma grande, inmensa muchedumbre quedará reducida a un pequeño número en medio de las naciones donde yo los dispersaré. (Baruc 2, 29)

  • Sin embargo, dejaré que un pequeño número de ellos escapen a la espada, al hambre y a la peste, para que cuenten todas sus abominaciones entre las naciones adonde vayan, a fin de que sepan que yo soy Yahveh. (Ezequiel 12, 16)

  • Pero este príncipe se ha rebelado contra él enviando mensajeros a Egipto en busca de caballos y tropas en gran número. ¿Le saldrá bien? ¿Se salvará el que ha hecho esto? Ha roto el pacto ¡y va a salvarse! (Ezequiel 17, 15)

  • Pues así dice el Señor Yahveh: He aquí que yo traigo contra Tiro, por el norte, a Nabucodonosor, rey de Babilonia, rey de reyes, con caballos, carros y jinetes y gran número de tropas. (Ezequiel 26, 7)

  • el año primero de su reinado, yo, Daniel, me puse a investigar en las Escrituras sobre el número de años que, según la palabra de Yahveh dirigida al profeta Jeremías, debían pasar sobre las ruinas de Jerusalén, a saber setenta años. (Daniel 9, 2)

  • Entonces se volverá hacia las islas y tomará un buen número de ellas; pero un magistrado pondrá fin a su ultraje sin que él pueda devolverle el ultraje. (Daniel 11, 18)

  • El número de los hijos de Israel será como la arena del mar, que no se mide ni se cuenta. Y en el lugar mismo donde se les decía «Nomipueblo», se les dirá: «Hijosde-Diosvivo.» (Oseas 2, 1)


“Como é belo esperar!” São Padre Pio de Pietrelcina