Encontrados 225 resultados para: modo

  • Ahora bien, si buscando nuestra justificación en Cristo, resulta que también nosotros somos pecadores, ¿estará Cristo al servicio del pecado? ¡De ningún modo! (Gálatas 2, 17)

  • Hermanos, voy a explicarme al modo humano: aun entre los hombres, nadie anula ni añade nada a un testamento hecho en regla. (Gálatas 3, 15)

  • Y digo yo: Un testamento ya hecho por Dios en debida forma, no puede ser anulado por la ley, que llega 430 años más tarde, de tal modo que la promesa quede anulada. (Gálatas 3, 17)

  • Según eso, ¿la ley se opone a las promesas de Dios? ¡De ningún modo! Si de hecho se nos hubiera otorgado una ley capaz de vivificar, en ese caso la justicia vendría realmente de la ley. (Gálatas 3, 21)

  • De modo que ya no eres esclavo, sino hijo; y si hijo, también heredero por voluntad de Dios. (Gálatas 4, 7)

  • conforme a lo que aguardo y espero, que en modo alguno seré confundido; antes bien, que con plena seguridad, ahora como siempre, Cristo será glorificado en mi cuerpo, por mi vida o por mi muerte, (Filipenses 1, 20)

  • Del mismo modo las obras buenas son manifiestas; y las que no lo son, no pueden quedar ocultas. (I Timoteo 5, 25)

  • Del mismo modo que Jannés y Jambrés se enfrentaron a Moisés, así también estos se oponen a la verdad; son hombres de mente corrompida, descalificados en la fe. (II Timoteo 3, 8)

  • Cuida de proveer de todo lo necesario para el viaje a Zenas, el perito en la Ley, y a Apolo, de modo que nada les falte. (Tito 3, 13)

  • De igual modo, tampoco Cristo se apropió la gloria del Sumo Sacerdocio, sino que la tuvo de quien le dijo: Hijo mío eres tú; yo te he engendrado hoy. (Hebreos 5, 5)

  • Y, en cierto modo, hasta el mismo Leví, que percibe los diezmos, los pagó por medio de Abraham, (Hebreos 7, 9)

  • De este modo queda abrogada la ordenación precedente, por razón de su ineficacia e inutilidad, (Hebreos 7, 18)


“Não se aflija a ponto de perder a paz interior. Reze com perseverança, com confiança, com calma e serenidade.” São Padre Pio de Pietrelcina