Encontrados 2394 resultados para: mar
Maridos, amad a vuestras mujeres como Cristo amó a la Iglesia y se entregó a sí mismo por ella, (Efesios 5, 25)
Así deben amar los maridos a sus mujeres como a sus propios cuerpos. El que ama a su mujer se ama a sí mismo. (Efesios 5, 28)
En todo caso, en cuanto a vosotros, que cada uno ame a su mujer como a sí mismo; y la mujer, que respete al marido. (Efesios 5, 33)
Para que también vosotros sepáis cómo me va y qué hago, os informará de todo Tíquico, el hermano querido y fiel ministro en el Señor, (Efesios 6, 21)
Mujeres, sed sumisas a vuestros maridos, como conviene en el Señor. (Colosenses 3, 18)
Maridos, amad a vuestras mujeres, y no seáis ásperos con ellas. (Colosenses 3, 19)
En cuanto a mí, de todo os informará Tíquico, el hermano querido, fiel ministro y consiervo en el Señor, (Colosenses 4, 7)
Y con él a Onésimo, el hermano fiel y querido compatriota vuestro. Ellos os informarán de todo cuanto aquí sucede. (Colosenses 4, 9)
Os saludan Aristarco, mi compañero de cautiverio, y Marcos, primo de Bernabé, acerca del cual recibisteis ya instrucciones. Si va a vosotros, dadle buena acogida. (Colosenses 4, 10)
En cuanto al amor mutuo, no necesitáis que os escriba, ya que vosotros habéis sido instruidos por Dios para amaros mutuamente. (I Tesalonicenses 4, 9)
el Adversario que se eleva sobre todo lo que que lleva el nombre de Dios o es objeto de culto, hasta el extremo de sentarse él mismo en el Santuario de Dios y proclamar que él mismo es Dios. (II Tesalonicenses 2, 4)
entre éstos están Himeneo y Alejandro, a quienes entregué a Satanás para que aprendiesen a no blasfemar. (I Timoteo 1, 20)