Encontrados 220 resultados para: filisteos

  • aplastó a los jefes adversarios y a todos los príncipes de los filisteos. (Eclesiástico 46, 18)

  • Pues él aplastó a los enemigos del contorno, aniquiló a los filisteos, sus adversarios, para siempre quebrantó su cuerno. (Eclesiástico 47, 7)

  • los habitantes de la montaña de Seír, los filisteos y el pueblo necio que mora en Siquem. (Eclesiástico 50, 26)

  • Has desechado a tu pueblo, la Casa de Jacob, porque estaban llenos de adivinos y evocadores, como los filisteos, y con extraños chocan la mano; (Isaías 2, 6)

  • Aram por delante y los filisteos por detrás, devoraron a Israel a boca llena. Con todo eso no se ha calmado su ira, y aún sigue su mano extendida. (Isaías 9, 11)

  • Lo que fue dicho por Yahveh al profeta Jeremías sobre los filisteos, en vísperas de batir el Faraón a Gaza. (Jeremías 47, 1)

  • Entonces yo levanté mi mano contra ti. Disminuí tu ración y te entregué a la animosidad de tus enemigas, las hijas de los filisteos, que se avergonzaban de la infamia de tu conducta. (Ezequiel 16, 27)

  • antes que fuese puesta al descubierto tu desnudez? Como ella, eres tú ahora el blanco de las burlas de las hijas de Edom y de todas las de los alrededores, de las hijas de los filisteos, que por todas partes te agobian a desprecios. (Ezequiel 16, 57)

  • Así dice el Señor Yahveh: Porque los filisteos han actuado vengativamente y han ejecutado su venganza con desprecio y animosidad, tratando de destruir a impulsos de un odio eterno, (Ezequiel 25, 15)

  • por eso, así dice el Señor Yahveh: He aquí que yo extiendo mi mano contra los filisteos; extirparé a los kereteos y destruiré lo que queda en el litoral del mar. (Ezequiel 25, 16)

  • extirparé al habitante de Asdod y de Ascalón al que empuña el cetro; volveré mi mano contra Ecrón, y perecerá lo que queda de los filisteos, dice el Señor Yahveh. (Amós 1, 8)

  • Pasad a Kalné y ved, id de allí a Jamat la grande, bajad luego a Gat de los filisteos. ¿Son acaso mejores que estos reinos? ¿Su territorio es mayor que el vuestro? (Amós 6, 2)


“Não há nada mais inaceitável do que uma mulher caprichosa, frívola e arrogante, especialmente se é casada. Uma esposa cristã deve ser uma mulher de profunda piedade em relação a Deus, um anjo de paz na família, digna e agradável em relação ao próximo.” São Padre Pio de Pietrelcina