Encontrados 457 resultados para: familia de Aarón

  • De los levitas: Jasabías, hijo de Quemuel. De Aarón: Sadoq. (I Crónicas 27, 17)

  • Entonces los cabezas de familia, los jefes de las tribus de Israel, los jefes de millar y de cien, y los encargados de las obras del rey, ofrecieron espontáneamente sus donativos, (I Crónicas 29, 6)

  • ¿No habéis expulsado a los sacerdotes de Yahveh, los hijos de Aarón y los levitas? ¿No os habéis hecho sacerdotes a la manera de los pueblos de los demás países? Cualquiera que viene con un novillo y siete carneros y pide ser consagrado, es hecho sacerdote de los que no son dioses. (II Crónicas 13, 9)

  • Cuanto a nosotros, Yahveh es nuestro Dios y no le hemos abandonado; los sacerdotes que sirven a Yahveh son los hijos de Aarón, igual que los levitas en su ministerio. (II Crónicas 13, 10)

  • También en Jerusalén estableció Josafat levitas, sacerdotes y cabezas de familia de Israel, para la administración de la justicia de Yahveh y para los litigios. Estos habitaban en Jerusalén. (II Crónicas 19, 8)

  • Anduvo por el camino de los reyes de Israel, como había hecho la casa de Ajab, porque se había casado con una mujer de la familia de Ajab, e hizo el mal a los ojos de Yahveh. (II Crónicas 21, 6)

  • recorrieron Judá y reunieron a los levitas de todas las ciudades de Judá, y a los cabezas de familia de Israel, que vinieron a Jerusalén. (II Crónicas 23, 2)

  • El número total de los jefes de familia era de 2.600 hombres esforzados. (II Crónicas 26, 12)

  • que se opusieron al rey Ozías y le dijeron: «No te corresponde a ti, Ozías, quemar incienso a Yahveh, sino a los sacerdotes, los hijos de Aarón, que han sido consagrados para quemar el incienso. ¡Sal del santuario porque estás prevaricando, y tú no tienes derecho a la gloria que viene de Yahveh Dios!» (II Crónicas 26, 18)

  • Trajeron siete novillos, siete carneros, siete corderos y siete machos cabríos para el sacrificio por el pecado en favor del reino, del santuario y de Judá; y mandó a los sacerdotes, hijos de Aarón, que ofreciesen holocaustos sobre el altar de Yahveh. (II Crónicas 29, 21)

  • Para los sacerdotes, hijos de Aarón, que vivían en el campo, en los ejidos de sus ciudades, había en cada ciudad hombres designados nominalmente, para dar las porciones a todos los varones de los sacerdotes, y a todos los levitas inscritos en las genealogías. (II Crónicas 31, 19)

  • Ocupad vuestros sitios en el santuario según los grupos de casas paternas a disposición de vuestros hermanos, los hijos del pueblo; los levitas tendrán parte en la familia paterna. (II Crónicas 35, 5)


“O demônio é forte com quem o teme, mas é fraquíssimo com quem o despreza.” São Padre Pio de Pietrelcina