Encontrados 259 resultados para: falsos profetas

  • Así dice el Señor Yahveh: Haré desaparecer las basuras, y pondré fin a los falsos dioses de Nof. No habrá más príncipes en Egipto, y yo sembraré el terror en el país de Egipto. (Ezequiel 30, 13)

  • Así dice el Señor Yahveh: Tú eres aquel de quien yo hablé antaño, por medio de mis siervos los profetas de Israel, que profetizaron en aquel tiempo, durante años, que yo te haría venir contra ellos. (Ezequiel 38, 17)

  • No hemos escuchado a tus siervos los profetas que en tu nombre hablaban a nuestros reyes, a nuestros príncipes, a nuestros padres, a todo el pueblo de la tierra. (Daniel 9, 6)

  • y no hemos escuchado la voz de Yahveh nuestro Dios para seguir sus leyes, que él nos había dado por sus siervos los profetas. (Daniel 9, 10)

  • Por eso les he hecho trizas por los profetas, los he matado por las palabras de mi boca, y mi juicio surgirá como la luz. (Oseas 6, 5)

  • hablaré a los profetas, multiplicaré las visiones, y por medio de los profetas hablaré en parábolas. (Oseas 12, 11)

  • Yo suscité profetas entre vuestros hijos, y nazireos entre vuestos jóvenes. ¿No es así, hijos de Israel?, oráculo de Yahveh. (Amós 2, 11)

  • Y vosotros habéis hecho beber vino a los nazireos, y habéis conminado a los profetas, diciendo: «¡No profeticéis!» (Amós 2, 12)

  • No, no hace nada el Señor Yahveh sin revelar su secreto a sus siervos los profetas. (Amós 3, 7)

  • Así dice Yahveh contra los profetas que extravían a mi pueblo, los que, mientras mascan con sus dientes, gritan: «¡Paz!», mas a quien no pone nada en su boca le declaran guerra santa. (Miqueas 3, 5)

  • Por eso tendréis noche sin visión, oscuridad sin adivinación; ¡se pone el sol sobre los profetas, sobre ellos el día se oscurece! (Miqueas 3, 6)

  • Sus jefes juzgan por soborno, sus sacerdotes enseñan por salario, sus profetas vaticinan por dinero, y se apoyan en Yahveh diciendo: «¿No está Yahveh en medio de nosotros? ¡No vendrá sobre nosotros ningún mal!» (Miqueas 3, 11)


“Reze, reze! Quem muito reza se salva e salva os outros. E qual oração pode ser mais bela e mais aceita a Nossa Senhora do que o Rosario?” São Padre Pio de Pietrelcina