Encontrados 294 resultados para: envió

  • Envió embajadores al rey Demetrio diciéndole: «Ven y concertemos entre nosotros una alianza. Te daré mi hija, la que tiene Alejandro, y reinarás en el reino de tu padre. (I Macabeos 11, 9)

  • El árabe Zabdiel cortó la cabeza a Alejandro y se la envió a Tolomeo. (I Macabeos 11, 17)

  • Entre tanto envió Jonatán a pedir al rey Demetrio que retirara las guarniciones de la Ciudadela de Jerusalén y de las plazas fuertes porque hostilizaban a Israel. (I Macabeos 11, 41)

  • Demetrio envió a decir a Jonatán: «No sólo haré esto por ti y por tu nación, sino que os colmaré de honores a ti y a tu nación cuando tenga oportunidad. (I Macabeos 11, 42)

  • Jonatán le envió a Antioquía 3.000 guerreros valientes, y cuando llegaron, el rey experimentó gran satisfacción con su venida. (I Macabeos 11, 44)

  • Le envió copas de oro y un servicio de mesa, y le concedió autorización de beber en copas de oro, vestir púrpura y llevar fíbula de oro. (I Macabeos 11, 58)

  • Los de las ciudad vinieron a suplicarle y Jonatán les dio la mano, pero tomó como rehenes a los hijos de los jefes y los envió a Jerusalén. A continuación, siguió recorriendo la región hasta Damasco. (I Macabeos 11, 62)

  • Viendo Jonatán que las circunstancias le eran favorables, escogió hombres y los envió a Roma con el fin de confirmar y renovar la amistad con ellos. (I Macabeos 12, 1)

  • Con el mismo objeto envió cartas a los espartanos y a otros lugares. (I Macabeos 12, 2)

  • Ya en tiempos pasados, Areios, que reinaba entre vosotros, envió una carta al sumo sacerdote Onías en que le decía que erais vosotros hermanos nuestros como lo atestigua la copia adjunta. (I Macabeos 12, 7)

  • Envió exploradores al campamento enemigo y supo por ellos, a su vuelta, que los enemigos estaban dispuestos para caer sobre ellos a la noche. (I Macabeos 12, 26)

  • Envió Trifón tropas y caballería a Galilea y a la Gran Llanura para acabar con todos los partidarios de Jonatán, (I Macabeos 12, 49)


“Seja perseverante nas orações e nas santas leituras.” São Padre Pio de Pietrelcina