Encontrados 20 resultados para: cortado

  • Luego construirás a Yahveh tu Dios, en la cima de esa altura escarpada, un altar bien preparado. Tomarás el toro y lo quemarás en holocausto, con la leña del cipo que habrás cortado.» (Jueces 6, 26)

  • A la mañana siguiente se levantó la gente de la ciudad; el altar de Baal estaba derruido, el cipo que se alzaba junto a él, cortado; y el toro había sido ofrecido en holocausto sobre el altar recién construido. (Jueces 6, 28)

  • La gente de la ciudad dijo entonces a Joás: «Haz salir a tu hijo, y que muera, pues ha derruido el altar de Baal y cortado el cipo que se alzaba a su lado.» (Jueces 6, 30)

  • Después su corazón le latía fuertemente por haber cortado la punta del manto de Saúl, (I Samuel 24, 6)

  • Mira, padre mío, mira la punta de tu manto en mi mano; si he cortado la punta de tu manto y no te he matado, reconoce y mira que no hay en mi camino maldad ni crimen, ni he pecado contra ti, mientras que tú me pones insidias para quitarme la vida. (I Samuel 24, 12)

  • Clamaron los israelitas al Señor su Dios, pues su ánimo empezaba a flaquear, viendo que el enemigo les había cercado y cortado toda retirada. (Judit 7, 19)

  • Aún en su verdor, sin ser cortado, antes que toda otra hierba se marchita. (Job 8, 12)

  • Una esperanza guarda el árbol: si es cortado, aún puede retoñar, y no dejará de echar renuevos. (Job 14, 7)

  • ¿Qué le importa la suerte de su casa, después de él, cuando se haya cortado la cuenta de sus meses? (Job 21, 21)

  • y después de haber cortado la lengua del impío Nicanor, ordenó que se diera en trozos a los pájaros y que se colgara frente al santuario la paga de su insensatez. (II Macabeos 15, 33)

  • Tú, hijo de hombre, toma una espada afilada, tómala como navaja de barbero, y pásatela por tu cabeza y tu barba. Luego tomarás una balanza y dividirás en partes lo que hayas cortado. (Ezequiel 5, 1)

  • Y yo promulgo este edicto: Pueblos, naciones y lenguas, todo aquel que hable ligeramente del Dios de Sadrak, Mesak y Abed Negó, será cortado en pedazos y su casa será reducida a escombros, porque no hay otro dios que pueda salvar de este modo.» (Daniel 3, 96)


“Onde há mais sacrifício, há mais generosidade.” São Padre Pio de Pietrelcina