Encontrados 156 resultados para: casas

  • Estos fueron los israelitas revistados por casas paternas. Total de alistados en los campamentos, repartidos en cuerpos de ejército, 603.550. (Números 2, 32)

  • «Haced el recuento de toda la comunidad de los israelitas, por casas paternas, de veinte años en adelante, de todos los útiles para la guerra.» (Números 26, 2)

  • No volveremos a nuestras casas hasta que los israelitas se posesionen cada uno de su herencia. (Números 32, 18)

  • Moisés dio orden al sacerdote Eleazar, a Josué, hijo de Nun, y a los jefes de las casas paternas de las tribus de los israelitas, (Números 32, 28)

  • pues la tribu de los hijos de Rubén con sus distintas casas paternas y la tribu de los hijos de Gad con sus distintas casas paternas, han recibido ya su herencia; y la media tribu de Manasés ha recibido también su herencia. (Números 34, 14)

  • Los jefes de familia del clan de los hijos de Galaad, hijo de Makir, hijo de Manasés, uno de los clanes de los hijos de José, se presentaron y dijeron delante de Moisés y de los principales jefes de las casas paternas de los israelitas: (Números 36, 1)

  • casas llenas de toda clase de bienes, que tú no llenaste, cisternas excavadas que tú no excavaste, viñedos y olivares que tú no plantaste, cuando hayas comido y te hayas saciado, (Deuteronomio 6, 11)

  • no sea que cuando comas y quedes harto, cuando construyas hermosas casas y vivas en ellas, (Deuteronomio 8, 12)

  • allí comeréis en presencia de Yahveh vuestro Dios y os regocijaréis, vosotros y vuestras casas, de todas las empresas en que Yahveh tu Dios te haya bendecido. (Deuteronomio 12, 7)

  • Cuando Yahveh tu Dios haya exterminado a las naciones cuya tierra te va a dar Yahveh tu Dios, cuando las hayas desalojado y habites en sus ciudades y sus casas, (Deuteronomio 19, 1)

  • Este nuestro pan estaba caliente cuando hicimos provisión de él en nuestras casas para el viaje, el día en que partimos para venir a vuestro encuentro: miradlo ahora duro y desmigado. (Josué 9, 12)

  • Los cinco hombres que habían ido a recorrer la tierra, tomaron la palabra y dijeron a sus hermanos: «¿No sabéis que hay aquí en estas casas un efod, unos terafim, una imagen y un ídolo de metal fundido? Considerad, pues, lo que habéis de hacer.» (Jueces 18, 14)


“É necessário manter o coração aberto para o Céu e aguardar, de lá, o celeste orvalho.” São Padre Pio de Pietrelcina