Encontrados 10 resultados para: antigua

  • Este es el plano sobre el que Salomón edificó la Casa de Dios: sesenta codos de longitud, en codos de medida antigua, y veinte codos de anchura. (II Crónicas 3, 3)

  • Tobit salió al encuentro de su nuera hasta las puertas de Nínive, bendiciendo a Dios, lleno de gozo. Cuando los de Nínive le vieron caminar, avanzando con su antigua firmeza, sin necesidad de lazarillo, se maravillaron. Tobit proclamó delante de ellos que Dios se había compadecido de él y le había abierto los ojos. (Tobías 11, 16)

  • ¿Vas a seguir tú la ruta antigua que anduvieron los hombres perversos? (Job 22, 15)

  • Yahveh bendijo la nueva situación de Job más aún que la antigua: llegó a poseer 14.000 ovejas, 6.000 camellos, mil yuntas de bueyes y mil asnas. (Job 42, 12)

  • Han venido a nosotros, en calidad de amigos y aliados nuestros, los embajadores de los judíos para renovar nuestra antigua amistad y alianza, enviados por el sumo sacerdote Simón y por el pueblo de los judíos, (I Macabeos 15, 17)

  • para que, obrando así, se librara de la muerte, y por su antigua amistad hacia ellos alcanzara benevolencia. (II Macabeos 6, 22)

  • Desgraciados, en cambio, y con la esperanza puesta en seres sin vida, los que llamaron dioses a obras hechas por mano de hombre, al oro, a la plata, trabajados con arte, a representaciones de animales o a una piedra inútil, esculpida por mano antigua. (Sabiduría 13, 10)

  • Toda esta tierra se tornará llanura, desde Gueba hasta Rimmón, al sur de Jerusalén. Y ésta, encumbrada, será habitada en su lugar, desde la Puerta de Benjamín hasta el emplazamiento de la antigua Puerta, es decir, hasta la Puerta de los Angulos, y desde la torre de Jananel hasta los Lagares del rey. (Zacarías 14, 10)

  • Y fue arrojado el gran Dragón, la Serpiente antigua, el llamado Diablo y Satanás, el seductor del mundo entero; fue arrojado a la tierra y sus Angeles fueron arrojados con él. (Apocalipsis 12, 9)

  • Dominó al Dragon, la Serpiente antigua - que es el Diablo y Satanás - y lo encadenó por mil años. (Apocalipsis 20, 2)


“O grau sublime da humildade é não só reconhecer a abnegação, mas amá-la.” São Padre Pio de Pietrelcina