Encontrados 1136 resultados para: Trono de David

  • Tú estarás al frente de mi casa, y de tu boca dependerá todo mi pueblo. Tan sólo el trono dejaré por encima de ti.» (Génesis 41, 40)

  • y morirá en el país de Egipto todo primogénito, desde el primogénito de Faraón que se sienta en su trono hasta el primogénito de la esclava encargada de moler, así como todo primer nacido del ganado. (Exodo 11, 5)

  • Y sucedió que, a media noche, Yahveh hirió en el país de Egipto a todos los primogénitos, desde el primogénito de Faraón, que se sienta sobre su trono, hasta el primogénito del preso en la cárcel, y a todo primer nacido del ganado. (Exodo 12, 29)

  • Cuando suba al trono real, deberá escribir esta Ley para su uso, copiándola del libro de los sacerdotes levitas. (Deuteronomio 17, 18)

  • Las vecinas le pusieron un nombre diciendo: «Le ha nacido un hijo a Noemí» y le llamaron Obed. Es el padre de Jesé, padre de David. (Rut 4, 17)

  • Obed engendró a Jesé y Jesé engendró a David. (Rut 4, 22)

  • Levanta del polvo al humilde, alza del muladar al indigente para hacerle sentar junto a los nobles, y darle en heredad trono de gloria, pues de Yahveh los pilares de la tierra y sobre ellos ha sentado el universo. (I Samuel 2, 8)

  • Estaba Samuel ofreciendo el holocausto, cuando los filisteos presentaron batalla a Israel, pero tronó Yahveh aquel día con gran estruendo sobre los filisteos, los llenó de terror y fueron batidos ante Israel. (I Samuel 7, 10)

  • Tomó Samuel el cuerno de aceite y le ungió en medio de sus hermanos. Y a partir de entonces, vino sobre David el espíritu de Yahveh. Samuel se levantó y se fue a Ramá. (I Samuel 16, 13)

  • Despachó Saúl mensajeros a Jesé que le dijeran: «Envíame a tu hijo David, el que está con el rebaño.» (I Samuel 16, 19)

  • Tomó Jesé cinco panes, un odre de vino y un cabrito y lo envió a Saúl con su hijo David. (I Samuel 16, 20)

  • Llegó David donde Saúl y se quedó a su servicio. Saúl le cobró mucho afecto y le hizo su sescudero. (I Samuel 16, 21)


“Seja paciente e espere com confiança o tempo do Senhor”. São Padre Pio de Pietrelcina