Encontrados 523 resultados para: Gran Ramera
Entonces aparecerá en el cielo la señal del Hijo del hombre; y entonces se golpearán el pecho todas las razas de la tierra y verán al Hijo del hombre venir sobre las nubes del cielo con gran poder y gloria. (Mateo 24, 30)
y lo puso en su sepulcro nuevo que había hecho excavar en la roca; luego, hizo rodar una gran piedra hasta la entrada del sepulcro y se fue. (Mateo 27, 60)
De pronto se produjo un gran terremoto, pues el Angel del Señor bajó del cielo y, acercándose, hizo rodar la piedra y se sentó encima de ella. (Mateo 28, 2)
Ellas partieron a toda prisa del sepulcro, con miedo y gran gozo, y corrieron a dar la noticia a sus discípulos. (Mateo 28, 8)
Jesús se retiró con sus discípulos hacia el mar, y le siguió una gran muchedumbre de Galilea. También de Judea, (Marcos 3, 7)
de Jerusalén, de Idumea, del otro lado del Jordán, de los alrededores de Tiro y Sidón, una gran muchedumbre, al oír lo que hacía, acudió a él. (Marcos 3, 8)
El, habiéndose despertado, increpó al viento y dijo al mar: «¡Calla, enmudece!» El viento se calmó y sobrevino una gran bonanza. (Marcos 4, 39)
Ellos se llenaron de gran temor y se decían unos a otros: «Pues ¿quién es éste que hasta el viento y el mar le obedecen?» (Marcos 4, 41)
y gritó con gran voz: «¿Qué tengo yo contigo, Jesús, Hijo de Dios Altísimo? Te conjuro por Dios que no me atormentes.» (Marcos 5, 7)
Había allí una gran piara de puercos que pacían al pie del monte; (Marcos 5, 11)
Y se fue con él. Le seguía un gran gentío que le oprimía. (Marcos 5, 24)
Llegan a Jericó. Y cuando salía de Jericó, acompañado de sus discípulos y de una gran muchedumbre, el hijo de Timeo (Bartimeo), un mendigo ciego, estaba sentado junto al camino. (Marcos 10, 46)
