Encontrados 316 resultados para: Desierto

  • y a los joritas en las montañas de Seír hasta El Parán, que está frente al desierto. (Génesis 14, 6)

  • La encontró el Angel de Yahveh junto a una fuente de agua en el desierto - la fuente que hay en el camino de Sur - (Génesis 16, 7)

  • Levantóse, pues, Abraham de mañana, tomó pan y un odre de agua, y se lo dio a Agar, le puso al hombro el niño y la despidió. Ella se fue y anduvo por el desierto de Berseba. (Génesis 21, 14)

  • Dios asistió al chico, que se hizo mayor y vivía en el desierto, y llegó a ser gran arquero. (Génesis 21, 20)

  • Vivía en el desierto de Parán, y su madre tomó para él una mujer del país de Egipto. (Génesis 21, 21)

  • Los hijos de Sibeón: Ayyá y Aná. Este es el mismo Aná que encontró las aguas termales en el desierto, cuando apacentaba los asnos de su padre Sibeón. (Génesis 36, 24)

  • Moisés era pastor del rebaño de Jetró su suegro, sacerdote de Madián. Una vez llevó las ovejas más allá del desierto; y llegó hasta Horeb, la montaña de Dios. (Exodo 3, 1)

  • Ellos escucharán tu voz, y tú irás con los ancianos de Israel donde el rey de Egipto; y le diréis: "Yahveh, el Dios de los hebreos, se nos ha aparecido. Permite, pues, que vayamos camino de tres días al desierto, para ofrecer sacrificios a Yahveh, nuestro Dios." (Exodo 3, 18)

  • Dijo Yahveh a Aarón: «Vete al desierto al encuentro de Moisés.» Partió, pues, y le encontró en el monte de Dios y le besó. (Exodo 4, 27)

  • Después se presentaron Moisés y Aarón a Faraón y le dijeron: «Así dice Yahveh, el Dios de Israel: Deja salir a mi pueblo para que me celebre una fiesta en el desierto.» (Exodo 5, 1)

  • Ellos dijeron: «El Dios de los hebreos se nos ha aparecido; permite, pues, que vayamos camino de tres días al desierto para ofrecer sacrificios a Yahveh, nuestro Dios, no sea que nos castigue con peste o espada.» (Exodo 5, 3)

  • Y le dirás: Yahveh, el Dios de los hebreos, me ha enviado a ti para decirte: "Deja partir a mi pueblo, para que me den culto en el desierto"; pero hasta el presente no has escuchado. (Exodo 7, 16)


“O Senhor se comunica conosco à medida que nos libertamos do nosso apego aos sentidos, que sacrificamos nossa vontade própria e que edificamos nossa vida na humildade.” São Padre Pio de Pietrelcina