Encontrados 198 resultados para: Campamento

  • y el sacerdote saldrá fuera del campamento; si, tras de haberlo examinado, comprueba que el leproso está ya curado de la llaga de lepra, (Levítico 14, 3)

  • El que se purifica lavará sus vestidos, se afeitará todo su pelo, se bañará en agua, y quedará limpio. Después podrá entrar en el campamento; pero durante siete días ha de habitar fuera de su tienda. (Levítico 14, 8)

  • El hombre encargado de soltar el macho cabrío para Azazel lavará sus vestidos y bañará su cuerpo en agua; después de esto podrá entrar en el campamento. (Levítico 16, 26)

  • Del novillo del sacrificio por el pecado y del macho cabrío inmolado por el pecado, cuya sangre fue introducida en el santuario para hacer expiación, serán sacados fuera del campamento y quemados con fuego sus pieles, su carne y sus excrementos. (Levítico 16, 27)

  • El que los queme lavará sus vestidos y se bañará en agua; después de esto podrá entrar en el campamento. (Levítico 16, 28)

  • Cualquier hombre de la casa de Israel que inmole buey, oveja o cabra dentro del campamento, o fuera del mismo, (Levítico 17, 3)

  • Saca al blasfemo fuera del campamento; todos los que lo oyeron pongan las manos sobre su cabeza, y que lo lapide toda la comunidad. (Levítico 24, 14)

  • Habló entonces Moisés a los israelitas. Sacaron al blasfemo fuera del campamento y lo lapidaron. Los israelitas hicieron como Yahveh había mandado a Moisés. (Levítico 24, 23)

  • Los israelitas acamparán cada uno en su campamento y bajo su bandera, por cuerpos de ejército. (Números 1, 52)

  • Acamparán al este, hacia la salida del sol: La bandera del campamento de Judá, por cuerpos de ejército. Principal de los hijos de Judá, Najsón, hijo de Aminadab. (Números 2, 3)

  • Total de alistados en el campamento de Judá: 186.400, reartidos en cuerpos de ejército. Marcharán en vanguardia. (Números 2, 9)

  • Al sur, la bandera del campamento de Rubén, por cuerpos de ejército. Principal de los hijos de Rubén, Elisur, hijo de Sedeur. (Números 2, 10)


“O demônio é forte com quem o teme, mas é fraquíssimo com quem o despreza.” São Padre Pio de Pietrelcina