Encontrados 123 resultados para: veinte

  • Los atacaron resueltamente y se apoderaron de las fortalezas, haciendo retroceder a todos los que combatían en las murallas y degollando a cuantos caían en sus manos. Así mataron por lo menos a veinte mil. (II Macabeos 10, 17)

  • Llevando todo a feliz término, con las armas en la mano, logró matar en las dos fortalezas a más de veinte mil hombres. (II Macabeos 10, 23)

  • Así perecieron veinte mil quinientos soldados y seiscientos jinetes. (II Macabeos 10, 31)

  • Pero al amanecer del quinto día, veinte jóvenes de las tropas del Macabeo, enfurecidos por las blasfemias, saltaron virilmente sobre la muralla y, con ímpetu salvaje, mataban a todos los que se les ponían delante. (II Macabeos 10, 35)

  • Luego el Macabeo distribuyó su ejército en batallones; puso al frente a aquellos dos capitanes y se dirigió contra Timoteo, que había reunido ciento veinte mil soldados y dos mil quinientos jinetes. (II Macabeos 12, 20)

  • Cada día pesarás una ración de veinte siclos, y la comerás a una hora determinada. (Ezequiel 4, 10)

  • El ancho de la entrada era de cinco metros y las paredes laterales de la entrada medían dos metros y medio de un lado, y lo mismo del otro. Luego midió el largo del Templo: veinte metros, y su ancho: diez metros. (Ezequiel 41, 2)

  • El siclo será de veinte gueras. Veinte siclos más veinte siclos y quince siclos serán para ustedes una mina. (Ezequiel 45, 12)

  • En los cuatro ángulos del atrio había pequeños patios de veinte metros de largo y quince de ancho, todos de las mismas dimensiones. (Ezequiel 46, 22)

  • Darío consideró oportuno poner al frente del reino a ciento veinte sátrapas, distribuidos por todo el reino, (Daniel 6, 2)

  • y yo, ¿no me voy a conmover por Nínive, la gran ciudad, donde habitan más de ciento veinte mil seres humanos que no saben distinguir el bien del mal, y donde hay además una gran cantidad de animales?". (Jonás 4, 11)

  • ¿qué les pasaba a ustedes? Alguien iba a pesar un montón de grano estimado en veinte medidas, y no había más que diez; iba al lagar para sacar cincuenta medidas, y no había más que veinte. (Ageo 2, 16)


“Quanto maiores forem os dons, maior deve ser sua humildade, lembrando de que tudo lhe foi dado como empréstimo.” São Padre Pio de Pietrelcina