Encontrados 147 resultados para: veces

  • Ahí tienen a Simeón, su hermano. Yo sé que es hombre sensato: escúchenlo siempre, y hará las veces de padre. (I Macabeos 2, 65)

  • Por eso temió que no le alcanzara, como otras veces, para los gastos y los regalos que antes solía hacer espléndidamente, superando a los reyes que lo habían precedido. (I Macabeos 3, 30)

  • Averigua, y sabrás quién soy yo y quiénes son los que nos ayudan: ellos dicen que ustedes no pueden resistirnos, ya que dos veces fueron derrotados tus padres en su propio país. (I Macabeos 10, 72)

  • He tenido en cuenta, además, que los soberanos de los países vecinos a mi reino están al acecho, esperando cualquier ocasión favorable. Por eso, he decidido designar rey a mi hijo Antíoco, a quien muchas veces, durante mis campañas a las provincias de la meseta, ya he presentado y recomendado a la mayor parte de ustedes. (II Macabeos 9, 25)

  • Apenas apareció el primer batallón de Judas, el pánico y el terror se apoderaron de los enemigos, porque se manifestó ante ellos Aquel que todo lo ve. Entonces huyeron en todas direcciones, de manera que muchas veces se herían unos a otros y se atravesaban entre ellos mismos con sus espadas. (II Macabeos 12, 22)

  • Una vez descubierto, paga siete veces y tiene que entregar todos los bienes de su casa. (Proverbios 6, 31)

  • unas veces en las calles, otras en las plazas, está al acecho en todas las esquinas. (Proverbios 7, 12)

  • porque el justo, aunque caiga siete veces, se levantará, mientras que los malvados se hunden en la desgracia. (Proverbios 24, 16)

  • Porque, además, tú sabes muy bien cuántas veces has maldecido a otros. (Eclesiastés 7, 22)

  • El pecador que hace cien veces el mal puede, a pesar de todo, vivir largo tiempo. Sin embargo, yo sé muy bien que la felicidad es para los que temen a Dios, porque ellos sienten temor en su presencia. (Eclesiastés 8, 12)

  • Unas veces, las llamas se apaciguaban para no abrasar a los animales enviados contra los impíos, y para que, al verlas, estos se sintieran perseguidos por un juicio de Dios. (Sabiduría 16, 18)

  • Otras veces, dentro mismo del agua, las llamas ardían con una fuerza superior a la del fuego, para destruir las cosechas de una tierra injusta. (Sabiduría 16, 19)


“Se você não entrega seu coração a Deus, o que lhe entrega?” “Você deve seguir outra estrada. Tire de seu coração todas as paixões deste mundo, humilhe-se na poeira e reze! Dessa forma, certamente você encontrará Deus, que lhe dará paz e serenidade nesta vida e a eterna beatitude na próxima.” São Padre Pio de Pietrelcina