Encontrados 45 resultados para: valientes

  • Pécaj, hijo de Remalías, mató en un solo día a ciento veinte mil hombres valientes de Judá, porque habían abandonado al Señor, el Dios de sus padres. (II Crónicas 28, 6)

  • Entonces el Señor envió un ángel que aniquiló a todos los guerreros valientes, a los jefes y a los oficiales en el campamento del rey de Asiria. Este tuvo que volver a su país, completamente avergonzado, y allí, al entrar en el templo de su dios, algunos de sus hijos lo asesinaron. (II Crónicas 32, 21)

  • Después de él trabajó Nehemías, hijo de Azbuc, jefe de la mitad del distrito de Betsur; él reparó hasta el lugar que está enfrente de las tumbas de David, hasta el estanque artificial y hasta la Casa de los Valientes. (Nehemías 3, 16)

  • Montañas de botín fueron arrebatadas a los valientes, que ya duermen el sueño de la muerte: a los guerreros no les respondieron los brazos. (Salmos 76, 6)

  • Entonces se les unió el grupo de los asideos, hombres valientes en Israel, todos ellos sinceramente fieles a la Ley. (I Macabeos 2, 42)

  • Por eso, hijos míos, sean valientes, y manténganse firmes en el cumplimiento de la Ley, ya que gracias a ella serán colmados de gloria. (I Macabeos 2, 64)

  • El sabio toma por asalto una ciudad de valientes y abate la fuerza en que ella confiaba. (Proverbios 21, 22)

  • La Amada: ¡Es la litera de Salomón! La rodean sesenta guerreros, de los más valientes de Israel: (Cantar 3, 7)

  • ¡Ay de los valientes para beber vino y de los campeones para mezclar bebidas, (Isaías 5, 22)

  • Y el resto de los arqueros de los valientes hijos de Quedar será muy poca cosa. Porque ha hablado el Señor, el Dios de Israel". (Isaías 21, 17)

  • Tus jefes desertaron todos juntos, cayeron prisioneros sin disparar el arco; todos tus valientes fueron apresados, mientras huían lejos. (Isaías 22, 3)

  • ¡A la carga, corceles, avancen enfurecidos los carros, salgan los valientes, gente de Cus y de Put que empuñan el escudo, y lidios que tensan el arco!". (Jeremías 46, 9)


“Na igreja se fala somente com Deus.” São Padre Pio de Pietrelcina