Encontrados 15 resultados para: ungió
Jacob erigió una piedra conmemorativa en el lugar donde Dios le había hablado. En seguida ofreció una libación sobre ella y ungió la piedra con aceite. (Génesis 35, 14)
En seguida Moisés tomó el óleo de la unción, ungió la Morada y todo lo que había en ella, y así los consagró. (Levítico 8, 10)
Hizo siete aspersiones con óleo sobre el altar, y ungió el altar y todos sus utensilios, la fuente y su base, para consagrarlos. (Levítico 8, 11)
Cuando Moisés terminó de erigir la Morada, la ungió y la consagró, junto con todo su mobiliario, y lo mismo hizo con el altar y sus utensilios. Y una vez que la ungió y la consagró, (Números 7, 1)
Samuel tomó el frasco de óleo y lo ungió en presencia de sus hermanos. Y desde aquel día, el espíritu del Señor descendió sobre David. Samuel, por su parte, partió y se fue a Ramá. (I Samuel 16, 13)
El sacerdote tomó de la Carpa el cuerno de aceite y ungió a Salomón. Entonces sonó la trompeta y todo el pueblo exclamó: ¡Viva el rey Salomón! (I Reyes 1, 39)
Entonces Iehoiadá hizo salir al hijo del rey y le impuso la diadema y el Testimonio. Se lo constituyó rey, se lo ungió, y todos aplaudieron, aclamando: "¡Viva el rey!". (II Reyes 11, 12)
Sus servidores cargaron el cadáver en un carro, lo llevaron de Meguido a Jerusalén y lo sepultaron en su tumba. Entonces el pueblo del país tomó a Joacaz, hijo de Josías, lo ungió y lo proclamó rey en lugar de su padre. (II Reyes 23, 30)
Luego se despojó del sayal que tenía ceñido, se quitó su ropa de viuda, se lavó el cuerpo con agua, se ungió con perfumes y peinó sus cabellos. Después se ciñó la cabeza con un turbante y se puso la ropa de fiesta con que solía engalanarse cuando aún vivía su marido Manasés; (Judit 10, 3)
Ella se quitó su ropa de luto, para exaltar a los afligidos de Israel: ungió su rostro con perfumes, (Judit 16, 7)
Moisés le confirió la investidura y lo ungió con el óleo santo. Esta fue una alianza eterna para él y para sus descendientes, mientras dure el cielo, para que sirvan a Dios como sacerdotes y bendigan al pueblo en su nombre. (Eclesiástico 45, 15)
Samuel fue amado por su Señor; como profeta del Señor, estableció la realeza y ungió jefes para que gobernaran a su pueblo. (Eclesiástico 46, 13)