Encontrados 1524 resultados para: tierra

  • Y al segundo le puso el nombre de Efraím, diciendo: "Dios me ha hecho fecundo en la tierra de mi aflicción". (Génesis 41, 52)

  • Y de todas partes iban a Egipto a comprar cereales a José, porque el hambre asolaba toda la tierra. (Génesis 41, 57)

  • José tenía plenos poderes sobre el país y distribuía raciones a toda la población. Sus hermanos se presentaron ante él y se postraron con el rostro en tierra. (Génesis 42, 6)

  • Cuando José entró en la casa, le presentaron los regalos que traían y se postraron ante él con el rostro en tierra. (Génesis 43, 26)

  • Cuando Judá y sus hermanos entraron en la casa de José, este todavía se encontraba allí. Ellos se postraron ante él con el rostro en tierra, (Génesis 44, 14)

  • Por eso Dios hizo que yo los precediera para dejarles un resto en la tierra y salvarles la vida, librándolos de una manera extraordinaria. (Génesis 45, 7)

  • El Faraón dijo a José: "Ordena a tus hermanos que carguen sus animales y vayan en seguida a la tierra de Canaán, (Génesis 45, 17)

  • Ellos salieron de Egipto y llegaron a la tierra de Canaán, donde se encontraba su padre Jacob. (Génesis 45, 25)

  • De esa manera, José adquirió para el Faraón todas las tierras de Egipto, porque los egipcios, acosados por el hambre, vendieron cada uno su campo. La tierra pasó a ser propiedad del Faraón, (Génesis 47, 20)

  • Pero cuando llegue la cosecha, ustedes deberán entregar al Faraón una quinta parte de los productos, y conservarán las cuatro partes restantes para sembrar la tierra, para alimentarse ustedes y sus familias, y para dar de comer a los niños". (Génesis 47, 24)

  • y dijo a José: "El Dios Todopoderoso se me apareció, en Luz, en la tierra de Canaán, y me bendijo, (Génesis 48, 3)

  • diciendo: ‘Yo te haré fecundo y numeroso, haré nacer de ti una asamblea de pueblos, y daré esta tierra a tu descendencia después de ti, en posesión perpetua’. (Génesis 48, 4)


“O medo excessivo nos faz agir sem amor, mas a confiança excessiva não nos deixa considerar o perigo que vamos enfrentar”. São Padre Pio de Pietrelcina