Encontrados 386 resultados para: testimonio de Josué

  • Josué deberá presentarse al sacerdote Eleazar, que consultará para él las decisiones del Urím, delante del Señor. Él y toda la comunidad de los israelitas harán todo conforme a estas decisiones". (Números 27, 21)

  • Moisés hizo lo que el Señor le había ordenado: tomó a Josué y lo presentó ante el sacerdote Eleazar y ante toda la comunidad. (Números 27, 22)

  • Ninguno, excepto Caleb, hijo de Iefuné, el quenizita, y Josué, hijo de Nun, que permanecieron fieles al Señor’. (Números 32, 12)

  • Luego Moisés dio instrucciones al sacerdote Eleazar, a Josué hijo de Nun, y a los jefes de familia de las tribus israelitas, (Números 32, 28)

  • Las personas que les repartirán el territorio serán el sacerdote Eleazar y Josué, hijo de Nun. (Números 34, 17)

  • Si alguien mata a una persona, el homicida será condenado a muerte por la declaración de testigos, pero el testimonio de uno solo no basta para condenar a muerte a alguien. (Números 35, 30)

  • El que entrará es Josué, tu ayudante. Infúndele valor, porque él deberá poner a Israel en posesión de la tierra. (Deuteronomio 1, 38)

  • Entonces hice esta advertencia a Josué: "Tú has visto con tus propios ojos todo lo que hizo el Señor, nuestro Dios, con estos dos reyes. De la misma manera tratará el Señor a todos los reinos por donde vas a pasar. (Deuteronomio 3, 21)

  • Da a Josué las debidas instrucciones, infúndele valor y anímalo, porque él lo cruzará al frente de este pueblo y lo pondrá en posesión de la tierra que ahora vas a ver." (Deuteronomio 3, 28)

  • No darás falso testimonio contra tu prójimo. (Deuteronomio 5, 20)

  • Para que alguien sea condenado a muerte se requiere el testimonio de dos o más testigos. Nadie será condenado a muerte en base al testimonio de uno solo. (Deuteronomio 17, 6)

  • El Señor, tu Dios, es el que cruzará delante de ti; él eliminará de tu presencia a todas esas naciones, y tú las desposeerás de sus dominios. Será Josué el que cruzará al frente de ti, como el Señor lo ha ordenado. (Deuteronomio 31, 3)


“Recorramos a Jesus e não às pessoas, pois só ele nunca nos faltará.” São Padre Pio de Pietrelcina