Encontrados 36 resultados para: tanta

  • Trifón dispuso toda su caballería para ir, pero aquella noche cayó tanta nieve que no pudo avanzar. Por eso partió y se fue a Galaad. (I Macabeos 13, 22)

  • Si a los enemigos de tus hijos, que eran reos de muerte, los castigaste con tanta consideración y miramiento, dándoles el tiempo y el lugar para apartarse de su maldad, (Sabiduría 12, 20)

  • si han sido capaces de adquirir tanta ciencia para escrutar el curso del mundo entero, ¿cómo no encontraron más rápidamente al Señor de todo? (Sabiduría 13, 9)

  • No digas: "Me ocultaré del Señor, y allá en lo alto, ¿quién se acordará de mí? Entre tanta gente pasaré inadvertido: ¿quién soy yo en la inmensa creación?". (Eclesiástico 16, 17)

  • Un hombre inteligente confía en la Ley y le tiene tanta fe como a un oráculo divino. (Eclesiástico 33, 3)

  • ¿Quién antes de él demostró tanta firmeza? ¡Él mismo llevó adelante los combates del Señor! (Eclesiástico 46, 3)

  • Su país es una desolación, sus ciudades, presa del fuego; su suelo, delante de ustedes, lo devoran extranjeros: ¡hay tanta desolación como en el desastre de Sodoma! (Isaías 1, 7)

  • Pero es tanta su herrumbre, que no desaparece ni con el fuego. (Ezequiel 24, 12)

  • Entonces el rey mandó traer a Daniel y arrojarlo al foso de los leones. El rey tomó la palabra y dijo a Daniel: "Tu Dios, al que sirves con tanta constancia, te salvará". (Daniel 6, 17)

  • Cuando se acercó a él, llamó a Daniel con voz angustiosa. El rey tomó la palabra y dijo a Daniel: "Daniel, servidor del Dios viviente, ¿ha podido tu Dios, al que sirves con tanta constancia, salvarte de los leones?". (Daniel 6, 21)

  • Al oírlo, Jesús quedó admirado y dijo a los que lo seguían: «Les aseguro que no he encontrado a nadie en Israel que tenga tanta fe. (Mateo 8, 10)

  • Al verse rodeado de tanta gente, Jesús mandó a sus discípulos que cruzaran a la otra orilla. (Mateo 8, 18)


“Os talentos de que fala o Evangelho são os cinco sentidos, a inteligência e a vontade. Quem tem mais talentos, tem maior dever de usá-los para o bem dos outros.” São Padre Pio de Pietrelcina