Encontrados 29 resultados para: sirven

• Harán desaparecer todos los lugares de culto, donde las naciones que ustedes van a desposeer sirven a sus dioses, en las montañas, sobre las colinas y debajo de todo árbol frondoso. (Deuteronomio 12, 2)

• Si ustedes temen al Señor y lo sirven, si escuchan su voz y no se muestran rebeldes a las órdenes del Señor, si ustedes mismos y el rey que reina sobre ustedes siguen al Señor, todo irá bien. (I Samuel 12, 14)

• Así, estas naciones veneran al Señor y sirven también a sus ídolos. Y sus hijos, y los hijos de sus hijos, hacen hasta el día de hoy lo que habían hecho sus padres. (II Reyes 17, 41)

• En cuanto a nosotros, nuestro Dios es el Señor y no lo hemos abandonado: los sacerdotes que sirven al Señor son los hijos de Aarón y los que ejercen el ministerio son los levitas. (II Crónicas 13, 10)

• ¡Por la vida de Nabucodonosor, rey de toda la tierra, y por el poder de él, que te envió para poner en orden a todos los vivientes! Gracias a ti, no sólo lo sirven los hombres, sino que también, gracias a tu fuerza, las fieras, el ganado y las aves del cielo vivirán sometidos a Nabucodonosor y a toda su dinastía. (Judit 11, 7)

• ¿Arguye con palabras inútiles y con discursos que no sirven de nada? (Job 15, 3)

• de nada sirven los caballos para la victoria: a pesar de su fuerza no pueden salvar. (Salmos 33, 17)

• Se avergüenzan los que sirven a los ídolos, los que se glorían en dioses falsos; todos los dioses se postran ante él. (Salmos 97, 7)

• y construiste tu mansión sobre las aguas. Las nubes te sirven de carruaje y avanzas en alas del viento. (Salmos 104, 3)

• Tesoros mal adquiridos no sirven de nada, pero la justicia libra de la muerte. (Proverbios 10, 2)

• ya que tuvieron por dioses a todos los ídolos de las naciones, que no pueden valerse de los ojos para ver, ni de las narices para respirar, ni de los oídos para oír, ni de los dedos de las manos para tocar, y cuyos pies no sirven para caminar. (Sabiduría 15, 15)

• Los que la sirven rinden culto al Santo y los que la aman son amados por el Señor. (Eclesiástico 4, 14)