Encontrados 10 resultados para: residentes

  • Tú les dirás a los israelitas: Cualquier hombre entre ustedes, o entre los extranjeros residentes en Israel, que entregue a alguno de sus descendientes a Moloc, será castigado con la muerte: el pueblo del país lo hará morir a pedradas. (Levítico 20, 2)

  • Habla en estos términos a Aarón y a sus hijos, y a todos los israelitas: Si un hombre de la casa de Israel, o alguno de los extranjeros residentes en Israel presenta su ofrenda al Señor para un holocausto -ya sea en cumplimiento de un voto o como ofrenda voluntaria- (Levítico 22, 18)

  • Esas seis ciudades podrán servir de refugio no sólo a los israelitas, sino también a los extranjeros residentes o que estén de paso entre ustedes, de manera que todo el que haya matado a otro involuntariamente, pueda refugiarse en ellas. (Números 35, 15)

  • David ordenó que se reuniera a todos los extranjeros residentes en el territorio de Israel y los empleó como obreros para que tallaran las piedras destinadas a la construcción de la Casa de Dios. (I Crónicas 22, 2)

  • Salomón hizo el censo de todos los extranjeros residentes en Israel, semejante al que había hecho su padre David, y se comprobó que estos eran ciento cincuenta y tres mil seiscientos. (II Crónicas 2, 16)

  • En todo pleito que provenga de sus hermanos residentes en cualquier ciudad -ya sean causas de sangre o cuestiones relativas a la Ley, a los mandamientos, a los preceptos y a las costumbres- ustedes deberán instruirlos, para que no se hagan culpables delante del Señor y su ira no se encienda contra ustedes y contra sus hermanos. Obren de esta manera, y no se harán culpables. (II Crónicas 19, 10)

  • El rey envió esta respuesta: "A Rejúm, gobernador, a Simsai, secretario, y a los demás colegas residentes en Samaría y en toda la región que está del otro lado del Éufrates, paz, etc. (Esdras 4, 17)

  • y pesé delante de ellos la plata, el oro y los utensilios, que el rey, sus consejeros y sus funcionarios y todos los israelitas residentes allí, habían ofrecido para la Casa de nuestro Dios. (Esdras 8, 25)

  • Todas las fiestas, los sábados, los novilunios y los días fijados para las solemnidades -con los tres días que preceden y siguen a cada fiesta- serán días de inmunidad y exención para todos los judíos residentes en mi reino: (I Macabeos 10, 34)

  • Se comprometió, además, por escrito a pagar otros ciento cincuenta talentos, si se le concedía la facultad de instalar por su propia cuenta un gimnasio y un ateneo juvenil y de inscribir en un registro a los antioquenos residentes en Jerusalén. (II Macabeos 4, 9)


“Uma só coisa é necessária: estar perto de Jesus”. São Padre Pio de Pietrelcina