Encontrados 457 resultados para: pecado de adulterio

  • A aquel que no conoció el pecado, Dios lo identificó con el pecado en favor nuestro, a fin de que nosotros seamos justificados por él. (II Corintios 5, 21)

  • Ahora bien, si al buscar nuestra justificación en Cristo, resulta que también nosotros somos pecadores, entonces Cristo está al servicio del pecado. Esto no puede ser, (Gálatas 2, 17)

  • Pero, de hecho, la Ley escrita sometió todo al pecado, para que la promesa se cumpla en aquellos que creen, gracias a la fe en Jesucristo. (Gálatas 3, 22)

  • Si se enojan, no se dejen arrastrar al pecado ni permitan que la noche los sorprenda enojados, (Efesios 4, 26)

  • En cuanto al pecado carnal y cualquier clase de impureza o avaricia, ni siquiera se los mencione entre ustedes, como conviene a los santos. (Efesios 5, 3)

  • La voluntad de Dios es que sean santos, que se abstengan del pecado carnal, (I Tesalonicenses 4, 3)

  • Y no fue Adán el que se dejó seducir, sino que Eva fue engañada y cayó en el pecado. (I Timoteo 2, 14)

  • A los que incurran en pecado, repréndelos públicamente, para que sirva de escarmiento a los demás. (I Timoteo 5, 20)

  • Antes bien, anímense mutuamente cada día mientras dure este hoy, a fin de que nadie se endurezca, seducido por el pecado. (Hebreos 3, 13)

  • ¿Y contra quiénes se irritó Dios durante cuarenta años? ¿No fue contra los que habían pecado y cuyos cadáveres quedaron tendidos en el desierto? (Hebreos 3, 17)

  • Porque no tenemos un Sumo Sacerdote incapaz de compadecerse de nuestras debilidades; al contrario, él fue sometido a las mismas pruebas que nosotros, a excepción del pecado. (Hebreos 4, 15)

  • Porque si la sangre de chivos y toros y la ceniza de ternera, con que se rocía a los que están contaminados por el pecado, los santifica, obteniéndoles la pureza externa, (Hebreos 9, 13)


“O Anjo de Deus não nos abandona jamais.” São Padre Pio de Pietrelcina