Encontrados 947 resultados para: muro de Jerusalén
Está de más que les escriba acerca de este servicio en favor de los hermanos de Jerusalén, (II Corintios 9, 1)
y sin subir a Jerusalén para ver a los que eran Apóstoles antes que yo, me fui a Arabia y después regresé a Damasco. (Gálatas 1, 17)
Tres años más tarde, fui desde allí a Jerusalén para visitar a Pedro, y estuve con él quince días. (Gálatas 1, 18)
Al cabo de catorce años, subí nuevamente a Jerusalén con Bernabé, llevando conmigo a Tito. (Gálatas 2, 1)
porque el monte Sinaí está en Arabia, y corresponde a la Jerusalén actual, ya que ella con sus hijos viven en la esclavitud. (Gálatas 4, 25)
Pero hay otra Jerusalén, la celestial, que es libre, y ella es nuestra madre. (Gálatas 4, 26)
Porque Cristo es nuestra paz: él ha unido a los dos pueblos en uno solo, derribando el muro de enemistad que los separaba, (Efesios 2, 14)
Ustedes, en cambio, se han acercado a la montaña de Sión, a la Ciudad del Dios viviente, a la Jerusalén celestial, a una multitud de ángeles, a una fiesta solemne, (Hebreos 12, 22)
Haré que el vencedor sea una columna en el Templo de mi Dios, y nunca más saldrá de allí. Y sobre él escribiré el nombre de mi Dios, y el nombre de la Ciudad de mi Dios -la nueva Jerusalén que desciende del cielo y viene de Dios- y también mi nombre nuevo". (Apocalipsis 3, 12)
Vi la Ciudad santa, la nueva Jerusalén, que descendía del cielo y venía de Dios, embellecida como una novia preparada para recibir a su esposo. (Apocalipsis 21, 2)
Me llevó en espíritu a una montaña de enorme altura, y me mostró la Ciudad santa, Jerusalén, que descendía del cielo y venía de Dios. (Apocalipsis 21, 10)