Encontrados 72 resultados para: mirada

  • El sacerdote les respondió: "Vayan en paz, porque el viaje que han emprendido está bajo la mirada del Señor". (Jueces 18, 6)

  • Sin embargo, Jonatán no había oído cuando su padre imponía al pueblo el juramento. Por eso, alargó el bastón que tenía en la mano, hundió la punta en la miel y se la llevó a la boca. Entonces se le iluminó la mirada. (I Samuel 14, 27)

  • Después fijó la mirada y permaneció así largo rato. Y el hombre de Dios lloró. (II Reyes 8, 11)

  • David llegó adonde estaba Ornán. Este dirigió una mirada y, al ver a David, salió de la era y se postró delante de él con el rostro en tierra. (I Crónicas 21, 21)

  • Pero Dios tenía puesta su mirada sobre los ancianos de los judíos, y no se los obligó a suspender los trabajos, hasta tanto se hiciera llegar un informe a Darío y se recibiera una respuesta oficial acerca de este asunto. (Esdras 5, 5)

  • Ana estaba sentada con la mirada fija en el camino por donde debía volver su hijo. (Tobías 11, 5)

  • "¡Señor, Dios del cielo!, mira su arrogancia y compadécete de la humillación de nuestra raza: vuelve en este día tu mirada a los que te están consagrados". (Judit 6, 19)

  • Así lo hicieron, y Judit salió acompañada de su servidora. Los hombres de la ciudad la siguieron con la mirada, mientras descendía de la montaña hasta que atravesó el valle, y allí la perdieron de vista. (Judit 10, 10)

  • Entonces alzó su rostro encendido de majestad y, en un arrebato de ira, lanzó una mirada fulminante. La reina se sintió desvanecer: débil como estaba, cambió de color y reclinó su cabeza sobre la dama de honor que la precedía. (Ester 15, 10)

  • El ojo que ahora me mira, ya no me verá; me buscará tu mirada, pero ya no existiré. (Job 7, 8)

  • ¡aparta de él tu mirada y déjalo solo, para que disfrute de su jornada como un asalariado! (Job 14, 6)

  • Su ira me desgarra y me hostiga, él rechina sus dientes contra mí. Mi adversario me atraviesa con la mirada; (Job 16, 9)


“Se você tem dúvidas sobre a fé é exatamente porque tem fé!” São Padre Pio de Pietrelcina