Encontrados 23 resultados para: librado

  • Moisés relató a su suegro todo lo que el Señor había hecho al Faraón y a los egipcios a causa de Israel, las dificultades con que habían tropezado en el camino, y cómo el Señor los había librado. (Exodo 18, 8)

  • Y Pinjás, el hijo del sacerdote Eleazar, les respondió: "Ahora reconocemos que el Señor está en medio de nosotros, porque ustedes no han cometido esa infidelidad contra él; de esa manera, ustedes han librado a los israelitas de la mano del Señor". (Josué 22, 31)

  • Así se olvidaron del Señor, su Dios, que los había librado de todos los enemigos de alrededor. (Jueces 8, 34)

  • Luego dijo Samuel: "Tráiganme a Agag, rey de los amalecitas". Agag se acercó a él muy complacido, pensando: "Seguramente, me he librado de la amargura de la muerte". (I Samuel 15, 32)

  • Y David añadió: "El Señor, que me ha librado de las garras del león y del oso, también me librará de la mano de ese filisteo". Entonces Saúl dijo a David: "Ve, y que el Señor esté contigo". (I Samuel 17, 37)

  • Y el rey juró, diciendo: "¡Por la vida del Señor, que me ha librado de todo peligro, (I Reyes 1, 29)

  • ¿Acaso los dioses de las naciones han librado a sus países de la mano del rey de Asiria? (II Reyes 18, 33)

  • ¿Dónde están los dioses de Jamat y de Arpad? ¿Dónde están los dioses de Sefarvaim, de Hená y de Ivá? ¿Dónde los dioses del país de Samaría? ¿Han librado de mi mano a Samaría? (II Reyes 18, 34)

  • y mi nación es Israel, los que clamaron a Dios y fueron salvados. El Señor ha liberado a su pueblo, el Señor nos ha librado de todos esos males, y Dios hizo esos grandes signos y prodigios, como nunca sucedió entre las naciones. (Ester 10, 9)

  • porque me has librado de todos mis adversarios y he visto la derrota de mis enemigos. (Salmos 54, 9)

  • Daniel, por su integridad, fue librado de las fauces de los leones. (I Macabeos 2, 60)

  • como lo había prometido por medio de la Ley, ese mismo Dios -así lo esperamos- tendrá compasión de nosotros y nos reunirá en el Santuario, desde todas las partes de la tierra. Porque él nos ha librado de graves males y ha purificado el Lugar santo. (II Macabeos 2, 18)


“Você teme um homem,um pobre instrumento nas mãos de Deus, mas não teme a justiça divina?” São Padre Pio de Pietrelcina