Encontrados 29 resultados para: lavar

  • Si el enfermo escupe a una persona pura, esta deberá lavar su ropa y bañarse con agua, y será impura hasta la tarde. (Levítico 15, 8)

  • Cualquiera que toque algún objeto que haya estado debajo de él, será impuro hasta la tarde. Y el que transporte ese objeto, deberá lavar su ropa y bañarse con agua, y será impuro hasta la tarde. (Levítico 15, 10)

  • El que haya sido tocado por alguien que padece de ese flujo y no se haya lavado cuidadosamente las manos, deberá lavar su ropa y bañarse con agua, y será impuro hasta la tarde. (Levítico 15, 11)

  • El que toque su lecho deberá lavar su ropa y bañarse con agua, y será impuro hasta la tarde. (Levítico 15, 21)

  • El que toque algún mueble sobre el que ella se haya sentado, deberá lavar su ropa y bañarse con agua, y será impuro hasta la tarde. (Levítico 15, 22)

  • El que los toque será impuro: deberá lavar su ropa y bañarse con agua, y será impuro hasta la tarde. (Levítico 15, 27)

  • El hombre encargado de soltar el chivo para Azazel deberá lavar su ropa y bañarse con agua; después podrá entrar de nuevo en el campamento. (Levítico 16, 26)

  • La persona que los queme deberá lavar su ropa y bañarse con agua; después podrá entrar de nuevo en el campamento. (Levítico 16, 28)

  • Cualquiera, sea nativo o extranjero, que coma un animal muerto o despedazado por las fieras, deberá lavar su ropa y bañarse con agua, y será impuro hasta la tarde. Después será puro. (Levítico 17, 15)

  • El que recoja las cenizas de la vaca deberá lavar su ropa y será impuro hasta la tarde. Este es un decreto irrevocable para los israelitas y para los extranjeros que vivan entre ellos. (Números 19, 10)

  • Este será para ustedes un decreto válido para siempre. Además, el que haga la aspersión con el agua lustral deberá lavar su ropa, y cualquiera que toque el agua lustral, será impuro hasta la tarde. (Números 19, 21)

  • Ella se puso de pie, se postró con el rostro en tierra, y respondió: "Aquí está tu esclava, dispuesta a lavar los pies de los servidores de mi señor". (I Samuel 25, 41)


“É loucura fixar o olhar no que rapidamente passa”. São Padre Pio de Pietrelcina