Encontrados 115 resultados para: fui

  • Por no haber estado ustedes allí la primera vez, el Señor, nuestro Dios, acometió contra nosotros, ya que no fuimos a consultarlo como está mandado". (I Crónicas 15, 13)

  • Estuve contigo dondequiera que fuiste y exterminé a todos tus enemigos delante de ti. Yo haré que tu nombre sea tan grande como el de los grandes de la tierra. (I Crónicas 17, 8)

  • Desde los días de nuestros padres hasta hoy, nos hemos hecho muy culpables, y a causa de nuestras iniquidades, nosotros, nuestros reyes y nuestros sacerdotes, fuimos entregados a los reyes extranjeros, a la espada, al cautiverio, al saqueo y a la vergüenza, como nos sucede en el día de hoy. (Esdras 9, 7)

  • Entonces fui a la casa de Semaías, hijo de Delaías, hijo de Mehetabel, que se hallaba impedido, y él dijo: "Encontrémonos en la Casa de Dios, en el interior del Templo, y cerremos sus puertas; porque van a venir a matarte y esta es la noche en que vendrán a hacerlo". (Nehemías 6, 10)

  • Tú fuiste paciente con ellos durante muchos años; les advertiste con tu espíritu, por medio de tus profetas; pero ellos no escucharon y tú los entregaste en manos de otros pueblos. (Nehemías 9, 30)

  • Después que me deportaron a Asiria y fui llevado cautivo, llegué a Nínive. Todos mis hermanos y mis compatriotas comían de los manjares de los paganos. (Tobías 1, 10)

  • Entonces me levanté rápidamente y, sin probar la comida, fui a retirar el cadáver de la plaza, y lo deposité en una habitación para enterrarlo al atardecer. (Tobías 2, 4)

  • Cuando no dudabas en levantarte de la mesa, dejando la comida para ir a sepultar un cadáver, yo fui enviado para ponerte a prueba. (Tobías 12, 13)

  • ¿Eres tú el primer hombre que nació? ¿Fuiste dado a luz antes que las colinas? (Job 15, 7)

  • Para Dios, yo soy igual que tú, yo también fui modelado de la arcilla. (Job 33, 6)

  • Tú solo tienes que decir a Dios: "Yo fui seducido, no volveré a hacer el mal; (Job 34, 31)

  • ¡Cuídate de volverte hacia la maldad, ya que por eso fuiste probado con la desgracia! (Job 36, 21)


“O mais belo Credo é o que se pronuncia no escuro, no sacrifício, com esforço”. São Padre Pio de Pietrelcina