Encontrados 262 resultados para: familia de Jesé

  • Un hombre de Dios se presentó a Elí y le dijo: "Así habla el Señor: Yo me revelé a la familia de tu padre, cuando ellos estaban en Egipto, bajo el poder de la casa del Faraón. (I Samuel 2, 27)

  • Elegí a tu padre entre todas las tribus de Israel, para que fuera mi sacerdote y subiera a mi altar, para que hiciera arder el incienso y llevara el efod en mi presencia. Y asigné a la familia de tu padre todas las ofrendas que hacen quemar los israelitas. (I Samuel 2, 28)

  • Por eso, el Señor, el Dios de Israel, pronuncia este oráculo: Yo había dicho que tu familia caminaría siempre en mi presencia. Pero ahora -oráculo del Señor- ¡lejos de mí todo eso! Porque yo honro a los que me honran, pero los que me desprecian son humillados. (I Samuel 2, 30)

  • Llegan los días en que amputaré tu brazo y el de la familia de tu padre, de manera que no habrá más ancianos en tu casa. (I Samuel 2, 31)

  • El Señor dijo a Samuel: "¿Hasta cuándo vas a estar lamentándote por Saúl, si yo lo he rechazado para que no reine más sobre Israel? ¡Llena tu frasco de aceite y parte! Yo te envío a Jesé, el de Belén, porque he visto entre sus hijos al que quiero como rey". (I Samuel 16, 1)

  • Invitarás a Jesé al sacrificio, y yo te indicaré lo que debes hacer: tú me ungirás al que yo te diga". (I Samuel 16, 3)

  • "Sí, respondió él; vengo a ofrecer un sacrificio al Señor. Purifíquense y vengan conmigo al sacrificio". Luego purificó a Jesé y a sus hijos y los invitó al sacrificio. (I Samuel 16, 5)

  • Jesé llamó a Abinadab y lo hizo pasar delante de Samuel, el cual dijo: "Tampoco a este ha elegido el Señor". (I Samuel 16, 8)

  • Así Jesé hizo pasar ante Samuel a siete de sus hijos, pero Samuel dijo a Jesé: "El Señor no ha elegido a ninguno de estos". (I Samuel 16, 10)

  • Entonces Samuel preguntó a Jesé: "¿Están aquí todos los muchachos?". Él respondió: "Queda todavía el más joven, que ahora está apacentando el rebaño". Samuel dijo a Jesé: "Manda a buscarlo, porque no nos sentaremos a la mesa hasta que llegue aquí". (I Samuel 16, 11)

  • Jesé lo hizo venir: era de tez clara, de hermosos ojos y buena presencia. Entonces el Señor dijo a Samuel: "Levántate y úngelo, porque es este". (I Samuel 16, 12)

  • Entonces intervino uno de sus servidores, diciendo: "Justamente he visto a un hijo de Jesé, el de Belén, que sabe tocar. Además, es valiente y hábil guerrero; habla muy bien, tiene buena presencia y el Señor está con él". (I Samuel 16, 18)


“Há alegrias tão sublimes e dores tão profundas que não se consegue exprimir com palavras. O silêncio é o último recurso da alma, quando ela está inefavelmente feliz ou extremamente oprimida!” São Padre Pio de Pietrelcina