Encontrados 67 resultados para: estar

  • Y ahora pueden estar seguros de que morirán por la espada, el hambre y la peste, en el lugar donde quieren entrar para residir allí". (Jeremías 42, 22)

  • Los trozos de madera sobre los que hayas escrito deberán estar en tu mano, bien a la vista de ellos. (Ezequiel 37, 20)

  • Dios le dijo a Jonás: "¿Te parece que tienes razón de enojarte por ese ricino?". Y él respondió: "Sí, tengo razón para estar enojado hasta la muerte". (Jonás 4, 9)

  • Jesús les respondió: «¿Acaso los amigos del esposo pueden estar tristes mientras el esposo está con ellos? Llegará el momento en que el esposo les será quitado, y entonces ayunarán. (Mateo 9, 15)

  • Al enterarse de eso, Jesús se alejó en una barca a un lugar desierto para estar a solas. Apenas lo supo la gente, dejó las ciudades y lo siguió a pie. (Mateo 14, 13)

  • Pero Zacarías dijo al Ángel: «¿Cómo puedo estar seguro de esto? Porque yo soy anciano y mi esposa es de edad avanzada». (Lucas 1, 18)

  • El cielo es mi trono, y la tierra la tarima de mis pies. ¿Qué casa me edificarán ustedes, dice el Señor, o dónde podrá estar mi lugar de reposo? (Hechos 7, 49)

  • Pablo había decidido pasar de largo por Éfeso, para no retrasarse demasiado en Asia. Estaba apurado porque, de ser posible, quería estar en Jerusalén el día de Pentecostés. (Hechos 20, 16)

  • Y él recibió el signo de la circuncisión, como sello de la justicia que alcanzó por medio de la fe, antes de ser circuncidado. Así llegó a ser padre de aquellos que, a pesar de no estar circuncidados, tienen la fe que les es tenida en cuenta para su justificación. (Romanos 4, 11)

  • ¡Y todavía se enorgullecen, en lugar de estar de duelo para que se expulse al que cometió esa acción! (I Corintios 5, 2)

  • Sí, nos sentimos plenamente seguros, y por eso, preferimos dejar este cuerpo para estar junto al Señor; (II Corintios 5, 8)

  • Ahora mismo desearía estar allí para hablarles de otra manera, porque ya no sé cómo proceder con ustedes. (Gálatas 4, 20)


“Rezai e continuai a rezar para não ficardes entorpecidos”. São Padre Pio de Pietrelcina