Encontrados 21 resultados para: digna

  • El camino de Dios es perfecto, la promesa del Señor es digna de confianza. El Señor es un escudo para los que se refugian en él, (II Samuel 22, 31)

  • para prepararme madera en abundancia, porque la Casa que quiero construir será grande y digna de admiración. (II Crónicas 2, 8)

  • "Si nuestro señor se digna escuchar un consejo, no habrá bajas en su ejército. (Judit 7, 9)

  • Luego ofreció un gran banquete a todos sus oficiales y servidores -el banquete de Ester- y además concedió franquicias a todas las provincias y otorgó regalos con la liberalidad digna de un rey. (Ester 2, 18)

  • El camino de Dios es perfecto, la promesa del Señor es digna de confianza. El Señor es un escudo para los que se refugian en él, (Salmos 18, 31)

  • Pero él, tomando una noble resolución, digna de su edad, del prestigio de su vejez, de sus venerables canas, de la vida ejemplar que había llevado desde su infancia y, sobre todo, de la santa legislación establecida por Dios, se mostró consecuente consigo mismo, pidiendo que lo enviaran de inmediato a la morada de los muertos. (II Macabeos 6, 23)

  • Incomparablemente admirable y digna del más glorioso recuerdo fue aquella madre que, viendo morir a sus siete hijos en un solo día, soportó todo valerosamente, gracias a la esperanza que tenía puesta en el Señor. (II Macabeos 7, 20)

  • para que esta tierra, la más querida por ti entre todas, recibiera una digna colonia de hijos de Dios. (Sabiduría 12, 7)

  • Por la mano del artista, la obra es digna de elogio, y el jefe del pueblo se muestra sabio por sus palabras. (Eclesiástico 9, 17)

  • ¿Qué raza es digna de honor? La raza humana. ¿Qué raza es digna de honor? Los que temen al Señor. ¿Qué raza es despreciable? La raza humana. ¿Qué raza es despreciable? Los que no cumplen la Ley. (Eclesiástico 10, 19)

  • porque tú has visto, que una piedra se desprendía de la montaña, sin la intervención de ninguna mano, y ella pulverizó el hierro, el bronce, la arcilla, la plata y el oro. El Dios grande hace conocer al rey lo que va a suceder en adelante. El sueño es cierto y su interpretación digna de fe". (Daniel 2, 45)

  • Yo, que estoy preso por el Señor, los exhorto a comportarse de una manera digna de la vocación que han recibido. (Efesios 4, 1)


“Ouço interiormente uma voz que constantemente me diz: Santifique-se e santifique!” São Padre Pio de Pietrelcina