Encontrados 17 resultados para: devastado
Así lo hizo el Señor, y una gran cantidad de tábanos se precipitó sobre el palacio del Faraón y sobre las casas de sus servidores; y todo el territorio de Egipto fue devastado por los tábanos. (Exodo 8, 20)
Y al ver todo su suelo devastado por el azufre y la sal, donde no se siembra ni crece nada, ni brota ninguna hierba -como sucedió en la catástrofe de Sodoma y Gomorra, de Admá y Seboím, a las que el Señor destruyó en su ira y su furor- (Deuteronomio 29, 22)
Los israelitas que habitaban en Judea se enteraron de la manera cómo Holofernes, general en jefe de Nabucodonosor, rey de los asirios, había tratado a aquellos pueblos y cómo había devastado sus santuarios, entregándolos luego a la destrucción. (Judit 4, 1)
porque han devorado a Jacob, y han devastado su dominio. (Salmos 79, 7)
Su Santuario quedó devastado como un desierto, sus fiestas se transformaron en duelo, sus sábados en motivo de burla y su honor en desprecio. (I Macabeos 1, 39)
con la intención de desembarcar en el país para perseguir a los que lo han arruinado y han devastado muchas ciudades de mi reino. (I Macabeos 15, 4)
Han devastado su territorio, causando graves daños al país, y se han adueñado de muchos lugares de mi reino. (I Macabeos 15, 29)
Yo dije: "¿Hasta cuándo, Señor?". Él respondió: "Hasta que las ciudades queden devastadas, sin habitantes, hasta que las casas estén sin un hombre y el suelo devastado sea una desolación. (Isaías 6, 11)
Oráculo sobre Tiro. ¡Giman, naves de Tarsis, porque su puerto ha sido devastado! Cuando llegaban de Quitím, recibieron el anuncio. (Isaías 23, 1)
¡Ay de ti, devastador que no has sido devastado, traidor, a quien no han traicionado! Cuando termines de devastar, serás devastado, cuando acabes de traicionar, te traicionarán a ti. (Isaías 33, 1)
Se anuncia un desastre tras otro, porque está devastado todo el país: mis carpas fueron devastadas de repente, mis pabellones, en un instante. (Jeremías 4, 20)
Derrama tu furor sobre las naciones que no te conocen, y sobre las familias que no invocan tu Nombre. Porque ellas han devorado a Jacob, lo han devorado, lo han exterminado, y han devastado su morada. (Jeremías 10, 25)