Encontrados 383 resultados para: descendientes de benjamín

  • ¿No has sido tú, Dios nuestro, el que expulsaste a los habitantes de esta tierra delante de tu pueblo Israel, y se la entregaste para siempre a los descendientes de tu amigo Abraham? (II Crónicas 20, 7)

  • Y los levitas del grupo de los descendientes de Quehat y de los descendientes de Coré se levantaron para alabar en alta voz al Señor, el Dios de Israel. (II Crónicas 20, 19)

  • toda la asamblea selló una alianza con el rey en la Casa de Dios. Iehoiadá les dijo: "Aquí está el hijo del rey. Él debe reinar, como lo dijo el Señor acerca de los descendientes de David. (II Crónicas 23, 3)

  • Amasías reunió a la gente de Judá y puso al frente de todo Judá y de Benjamín, agrupados por familias, jefes de mil y de cien hombres. Registró a los que tenían más de veinte años, y comprobó que había trescientos mil guerreros aptos para salir en campaña, armados de lanza y escudo. (II Crónicas 25, 5)

  • Entonces se presentaron los levitas: De los descendientes de Quehat: Majat, hijo de Amasai, y Joel, hijo de Azarías; de los descendientes de Merarí: Quis, hijo de Abdí, y Azarías, hijo de Iehalelel; de los descendientes de Gersón: Ioaj, hijo de Zimá, y Eden, hijo de Ioaj; (II Crónicas 29, 12)

  • de los descendientes de Elisafán: Simrí y Ieiel; de los descendientes de Asaf: Zacarías y Matanías; (II Crónicas 29, 13)

  • de los descendientes de Hemán: Iejiel y Simei; de los descendientes de Iedutún: Semaías y Uziel. (II Crónicas 29, 14)

  • Una vez terminada la fiesta, los israelitas que se encontraban allí salieron por las ciudades de Judá y destrozaron las piedras conmemorativas, talaron los postes sagrados y demolieron los lugares altos y los altares de todo Judá y Benjamín, y también los de Efraím y Manasés, hasta destruirlos completamente. Luego todos los israelitas regresaron a sus ciudades, cada uno a su posesión. (II Crónicas 31, 1)

  • Ellos se presentaron a Jilquías, el sumo sacerdote, y le entregaron el dinero recaudado para la Casa de Dios, que los levitas guardianes del umbral habían recogido de Manasés, de Efraím y de todo el resto de Israel, de todo Judá y Benjamín, y de los habitantes de Jerusalén. (II Crónicas 34, 9)

  • Él hizo que se comprometieran todos los que se encontraban en Jerusalén y en Benjamín, y los habitantes de Jerusalén obraron conforme a la alianza de Dios, el Dios de sus padres. (II Crónicas 34, 32)

  • Entonces los jefes de familia de Judá y de Benjamín, los sacerdotes y los levitas, y todos los que se sintieron movidos por Dios, se pusieron en camino para ir a reconstruir la Casa del Señor que está en Jerusalén. (Esdras 1, 5)

  • Cuando los enemigos de Judá y de Benjamín se enteraron de que los antiguos exiliados estaban construyendo un Templo para el Señor, el Dios de Israel, (Esdras 4, 1)


“Quando a videira se separa da estaca que a sustenta, cai, e ao ficar na terra apodrece com todos os cachos que possui. Alerta, portanto, o demônio não dorme!” São Padre Pio de Pietrelcina