Encontrados 22 resultados para: derramar%C3%A9

  • Deberás cortarla en pedazos y derramar aceite sobre ella: es una oblación. (Levítico 2, 6)

  • Y ahora, ¡por la vida del Señor y por tu propia vida! es el mismo Señor el que te impide derramar sangre y hacerte justicia por tu mano. ¡Que tus enemigos y todos los que tratan de hacerte mal corran la misma suerte que Nabal! (I Samuel 25, 26)

  • ¡Bendito sea tu buen tino, y bendita también tú, que hoy me has impedido derramar sangre y hacerme justicia por mí mismo! (I Samuel 25, 33)

  • y cuando el sacrificio quedó consumido, Nehemías mandó derramar el resto del líquido sobre unas grandes piedras. (II Macabeos 1, 31)

  • porque sus pies corren hacia el mal y se apresuran para derramar sangre. (Proverbios 1, 16)

  • ¿No corren las lágrimas por las mejillas de la viuda y su clamor no acusa al que las hace derramar? (Eclesiástico 35, 15)

  • sus pies corren hacia el mal, se apresuran para derramar sangre inocente; sus planes son planes perversos, a su paso hay devastación y ruina. (Isaías 59, 7)

  • Por eso, así habla el Señor: Miren que mi ira y mi furor se van a derramar sobre este lugar, sobre los hombres y los animales, sobre los árboles de los campos y los frutos del suelo: ¡arderá mi furor y no se extinguirá! (Jeremías 7, 20)

  • Pero tú no tienes ojos ni corazón más que para tus ganancias, para derramar sangre inocente, para practicar la opresión y la violencia. (Jeremías 22, 17)

  • ¡Ya ha llegado tu fin! Voy a derramar mi ira sobre ti, te juzgaré según tu conducta y haré recaer sobre ti todas tus abominaciones. (Ezequiel 7, 3)

  • Pero ellos se rebelaron contra mí y no quisieron escucharme; ninguno arrojó las cosas abominables que atraían sus miradas y no abandonaron los ídolos de Egipto. Entonces yo pensé derramar mi furor y desahogar mi ira contra ellos en la tierra de Egipto. (Ezequiel 20, 8)

  • Pero la casa de Israel se rebeló contra mí en el desierto: ellos no siguieron mis preceptos y despreciaron mis leyes, que hacen vivir al hombre que las practica, y no hicieron más que profanar mis sábados. Entonces pensé derramar mi furor sobre ellos en el desierto para exterminarlos. (Ezequiel 20, 13)


“De todos os que vierem pedir meu auxílio, nunca perderei nenhum!” São Padre Pio de Pietrelcina