Encontrados 47 resultados para: corresponde

  • Trátalos conforme a sus acciones, como corresponde a su mala conducta; trátalos según la obra de sus manos, págales su merecido. (Salmos 28, 4)

  • A ti, Señor, te corresponde un canto de alabanza en Sión, y todos tienen que cumplir sus votos, (Salmos 65, 2)

  • Porque así como al arquitecto de una casa nueva, le corresponde preocuparse de toda la construcción, en tanto que los decoradores y pintores sólo se ocupan de la ornamentación, pienso que lo mismo sucede con nosotros: (II Macabeos 2, 29)

  • Hay una cosa vana que acontece sobre la tierra; a algunos justos les sucede lo que corresponde a la manera de obrar de los malvados, y a algunos malvados les sucede lo que corresponde a la manera de obrar de los justos. Yo digo que también esto es vanidad. (Eclesiastés 8, 14)

  • No discutas sobre lo que no te corresponde ni te entrometas en las disputas de los pecadores. (Eclesiástico 11, 9)

  • Habla, anciano, porque te corresponde hacerlo, pero con discreción y sin interrumpir la música. (Eclesiástico 32, 3)

  • Oblígalo a trabajar como le corresponde, y si no obedece, ata sus pies con cadenas. (Eclesiástico 33, 29)

  • Honra al médico por sus servicios, como corresponde, porque también a él lo ha creado el Señor. (Eclesiástico 38, 1)

  • ¿Quién no sentirá temor de ti, Rey de las naciones? Sí, eso es lo que te corresponde, porque entre todos los sabios de las naciones y en todos sus reinos, no hay nadie como tú. (Jeremías 10, 7)

  • Janamel, hijo de tu tío Salúm, viene hacia ti para decirte: Compra mi campo que está en Anatot, porque a ti te corresponde adquirirlo, en virtud del derecho de rescate". (Jeremías 32, 7)

  • Lo heredarán todos por igual, porque yo juré con la mano en alto que se lo daría a sus padres, y por eso este país le corresponde a ustedes como herencia. (Ezequiel 47, 14)

  • Después dije: ¡Escuchen, jefes de Jacob y magistrados de la casa de Israel! ¿No les corresponde a ustedes conocer el derecho, (Miqueas 3, 1)


“Vive-se de fé, não de sonhos.” São Padre Pio de Pietrelcina