Encontrados 201 resultados para: conversión de Pablo
Pablo, Apóstol -no de parte de hombres ni por la mediación de un hombre, sino por Jesucristo y por Dios Padre que lo resucitó de entre los muertos- (Gálatas 1, 1)
Yo mismo, Pablo, les digo: si ustedes se hacen circuncidar, Cristo no les servirá de nada. (Gálatas 5, 2)
Pablo, Apóstol de Jesucristo por la voluntad de Dios, saluda a los santos que creen en Cristo Jesús. (Efesios 1, 1)
Por eso yo, Pablo, estoy preso por Cristo Jesús, a causa de ustedes, los de origen pagano. (Efesios 3, 1)
Pablo y Timoteo, servidores de Cristo Jesús, saludan a todos los santos en Cristo Jesús, que se encuentran en Filipos, así como también a los que presiden la comunidad y a los diáconos. (Filipenses 1, 1)
Pablo, Apóstol de Jesucristo por la voluntad de Dios, y el hermano Timoteo (Colosenses 1, 1)
Para esto es necesario que ustedes permanezcan firmes y bien fundados en la fe, sin apartarse de la esperanza transmitida por la Buena Noticia que han oído y que fue predicada a todas las criaturas que están bajo el cielo y de la cual yo mismo, Pablo, fui constituido ministro. (Colosenses 1, 23)
El saludo es de mi puño y letra, Pablo. Acuérdense de mis cadenas. La gracia esté con ustedes. (Colosenses 4, 18)
Pablo, Silvano y Timoteo saludan a la Iglesia de Tesalónica, que está unida a Dios Padre y al Señor Jesucristo. Llegue a ustedes la gracia y la paz. (I Tesalonicenses 1, 1)
Por eso quisimos ir hasta allí; yo mismo, Pablo, lo intenté varias veces, pero Satanás me lo impidió. (I Tesalonicenses 2, 18)
Pablo, Silvano y Timoteo saludan a la Iglesia de Tesalónica, que está unida a Dios, nuestro Padre y al Señor Jesucristo. (II Tesalonicenses 1, 1)
El saludo es de mi puño y letra. Esta es la señal característica de todas mis cartas: así escribo yo, Pablo. (II Tesalonicenses 3, 17)
