Encontrados 737 resultados para: cielo abierto
Es verdad que algunos son considerados dioses, sea en el cielo o en la tierra: de hecho, hay una cantidad de dioses y una cantidad de señores. (I Corintios 8, 5)
El primer hombre procede de la tierra y es terrenal; pero el segundo hombre procede del cielo. (I Corintios 15, 47)
ya que se ha abierto una gran puerta para mi predicación, aunque los adversarios son numerosos. (I Corintios 16, 9)
Nosotros sabemos, en efecto, que si esta tienda de campaña -nuestra morada terrenal- es destruida, tenemos una casa permanente en el cielo, no construida por el hombre, sino por Dios. (II Corintios 5, 1)
Les hemos hablado, corintios, con toda franqueza y hemos abierto completamente nuestro corazón. (II Corintios 6, 11)
Conozco a un discípulo de Cristo que hace catorce años -no sé si con el cuerpo o fuera de él, ¡Dios lo sabe!- fue arrebatado al tercer cielo. (II Corintios 12, 2)
Pero si nosotros mismos o un ángel del cielo les anuncia un evangelio distinto del que les hemos anunciado, ¡que sea expulsado! (Gálatas 1, 8)
Bendito sea Dios, el Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos ha bendecido en Cristo con toda clase de bienes espirituales en el cielo, (Efesios 1, 3)
para que se cumpliera en la plenitud de los tiempos: reunir todas las cosas, las del cielo y las de la tierra, bajo un solo jefe, que es Cristo. (Efesios 1, 10)
que Dios manifestó en Cristo, cuando lo resucitó de entre los muertos y lo hizo sentar a su derecha en el cielo, (Efesios 1, 20)
y con Cristo Jesús nos resucitó y nos hizo reinar con él en el cielo. (Efesios 2, 6)
de quien procede toda paternidad en el cielo y en la tierra. (Efesios 3, 15)
