Encontrados 795 resultados para: bien

  • Y cedí a media tribu de Manasés el resto de Galaad y todo Basán -el reino de Og- incluyendo el distrito de Argob. Ahora bien, todo Basán es lo que hoy se llama Tierra de Gigantes. (Deuteronomio 3, 13)

  • Tengan bien presente que ha sido el Señor, mi Dios, el que me ordenó enseñarles los preceptos y las leyes que ustedes deberán cumplir en la tierra de la que van a tomar posesión. (Deuteronomio 4, 5)

  • Cuando el Señor oyó las palabras que ustedes me dirigieron, me advirtió: "He oído las palabras que te dijo este pueblo. Todo lo que han dicho está muy bien. (Deuteronomio 5, 28)

  • observando sus mandamientos y sus preceptos, que hoy te prescribo para tu bien. (Deuteronomio 10, 13)

  • Entonces el Señor me dijo: "Lo que acaban de decir está muy bien. (Deuteronomio 18, 17)

  • y este último también la rechaza, escribe un acta de divorcio y la despide, o bien muere, (Deuteronomio 24, 3)

  • Cuando se produzcan casos de lepra, cuida muy bien de hacer exactamente lo que les indiquen los sacerdotes levitas. Pongan cuidado en practicar lo que yo les he mandado. (Deuteronomio 24, 8)

  • El día en que crucen el Jordán para ir a la tierra que el Señor, tu Dios, te da, erigirás unas piedras, bien grandes, las blanquearás con cal, (Deuteronomio 27, 2)

  • y escribirás en las piedras, con rasgos bien claros, todas las palabras de esta Ley. (Deuteronomio 27, 8)

  • Ustedes saben muy bien que nosotros estuvimos en Egipto, y que luego pasamos por varias otras naciones. (Deuteronomio 29, 15)

  • Porque si alguien, al oír los términos de esta imprecación, se congratula diciendo: "Todo me irá bien aunque persista en mi obstinación, ya que el terreno regado no tiene más sed", (Deuteronomio 29, 18)

  • Porque yo conozco muy bien tu rebeldía y tu obstinación. Y si ahora que estoy todavía con ustedes, son tan rebeldes al Señor, ¡cuánto más lo serán después de mi muerte! (Deuteronomio 31, 27)


“Quanto mais te deixares enraizar na santa humildade, tanto mais íntima será a comunicação da tua alma com Deus”. São Padre Pio de Pietrelcina