Encontrados 31 resultados para: bebe

  • Ella abre la boca como un viajero sediento y bebe toda el agua que se le ofrece; se sienta ante cualquier estaca y abre su aljaba a todas las flechas. (Eclesiástico 26, 12)

  • Mientras se bebe vino, no reprendas a tu prójimo ni lo humilles si se pone alegre; no le dirijas palabras injuriosas ni lo importunes con reclamos. (Eclesiástico 31, 31)

  • Sello de rubí en una alhaja de oro es un concierto musical mientras se bebe vino; (Eclesiástico 32, 5)

  • Se pone la mesa, se extiende el tapiz, se come, se bebe. ¡De pie, príncipes, engrasen el escudo! (Isaías 21, 5)

  • en cambio, hay gozo y alegría, se matan bueyes y se degüellan ovejas, se come carne y se bebe vino: "¡Comamos y bebamos, porque mañana moriremos!". (Isaías 22, 13)

  • Ya no se bebe vino entre canciones, el licor es amargo para el que lo bebe. (Isaías 24, 9)

  • Como el hambriento sueña que come, y se despierta con el estómago vacío; como el sediento sueña que bebe, y se despierta exhausto, con la garganta seca, así le sucederá al tropel de todas las naciones que atacan a la montaña de Sión. (Isaías 29, 8)

  • El herrero forja la imagen, la trabaja al fuego y la modela con el martillo: la trabaja con su brazo robusto. Después siente hambre y decae su fuerza; si no bebe agua, queda agotado. (Isaías 44, 12)

  • Entonces dijo el rey: "¿Tú no crees que Bel es un dios vivo? ¿No ves lo que come y bebe diariamente?". (Daniel 14, 6)

  • El rey dijo a Daniel: "¿Vas a decir que también este es de bronce? Míralo, él vive, come y bebe; no puedes negar que es un dios vivo: adóralo, entonces". (Daniel 14, 24)

  • Te has saciado de ignominia, no de gloria; ¡bebe tú también y muestra tu prepucio! El cáliz de la mano del Señor se volverá sobre ti, y tu gloria se convertirá en ignominia. (Habacuc 2, 16)

  • Porque llegó Juan, que no come ni bebe, y ustedes dicen: "¡Ha perdido la cabeza!". (Mateo 11, 18)


“A natureza humana também quer a sua parte. Até Maria, Mãe de Jesus, que sabia que por meio de Sua morte a humanidade seria redimida, chorou e sofreu – e como sofreu!” São Padre Pio de Pietrelcina