Encontrados 1063 resultados para: bajo su mano

  • La copa del faraón estaba en mi mano: yo tomé las uvas, las exprimí en esa copa, y la puse en la mano del Faraón". (Génesis 40, 11)

  • Dentro de tres días, el Faraón te indultará, te restituirá a tu cargo, y tú pondrás la copa en su mano, como acostumbrabas a hacerlo antes, cuando eras su copero. (Génesis 40, 13)

  • y restituyó en su cargo al copero mayor, de manera que este volvió a poner la copa en la mano del Faraón; (Génesis 40, 21)

  • En cierta oportunidad, el Faraón se irritó contra sus servidores, y me puso bajo custodia, junto con el panadero mayor, en la casa del capitán de guardias. (Génesis 41, 10)

  • Ellos reunirán los víveres que se cosechen en estos próximos siete años de prosperidad, y almacenarán el grano bajo la supervisión del Faraón, para tenerlo guardado en las ciudades. (Génesis 41, 35)

  • En seguida se quitó el anillo de su mano y lo puso en la mano de José; lo hizo vestir con ropa de lino fino y le colgó al cuello una cadena de oro. (Génesis 41, 42)

  • El Faraón dijo a José: "Yo soy el Faraón, pero nadie podrá mover una mano o un pie en todo el territorio de Egipto si tú no lo apruebas". (Génesis 41, 44)

  • E inmediatamente, los puso bajo custodia durante tres días. (Génesis 42, 17)

  • Para probar que ustedes son sinceros, uno de sus hermanos quedará como rehén en la prisión donde están bajo custodia, mientras el resto llevará los víveres, para aliviar el hambre de sus familias. (Génesis 42, 19)

  • Pero Rubén le respondió: "Podrás matar a mis dos hijos si no te lo traigo de vuelta. Déjalo bajo mi cuidado, y yo te lo devolveré sano y salvo". (Génesis 42, 37)

  • Entonces Judá dijo a su padre Israel: "Envía al muchacho bajo mi responsabilidad, y ahora mismo nos pondremos en camino para poder sobrevivir. De lo contrario moriremos nosotros, tú y nuestros niños. (Génesis 43, 8)

  • Cuando estaba a punto de morir, llamó a su hijo José y le dijo: "Si realmente me tienes afecto, coloca tu mano debajo de mi muslo, como prueba de tu constante lealtad hacia mí, y no me entierres en Egipto. (Génesis 47, 29)


“Se você fala das próprias virtudes para se exibir ou para vã ostentação perde todo o mérito.” São Padre Pio de Pietrelcina