Encontrados 102 resultados para: Ruina

  • Él mismo ofreció sacrificios a los dioses de Damasco que lo habían derrotado, diciendo: "Ya que estos dioses ayudan a los reyes de Arám, yo les ofreceré sacrificios para que me ayuden también a mí". Pero ellos causaron su ruina y la de todo Israel. (II Crónicas 28, 23)

  • Por lo tanto, hijo mío, prefiere a tus hermanos; no te muestres orgulloso con los hijos y las hijas de tu pueblo, rehusando tomar una esposa entre ellos. Porque el orgullo acarrea la ruina y un gran desorden, y la ociosidad lleva a la decadencia y a la miseria; ella es, en efecto, madre de la penuria. (Tobías 4, 13)

  • Antes de morir, fue testigo de la ruina de Nínive, y vio como sus habitantes eran llevados cautivos a Media por Ciajares, rey de Media. Él bendijo a Dios por todo lo que había hecho a los ninivitas y a los asirios. Antes de su muerte, pudo alegrarse por la suerte de Nínive y bendijo al Señor Dios por los siglos de los siglos. Amén. (Tobías 14, 15)

  • Y ahora, soberano señor, si hay una falta en este pueblo, si pecan contra su Dios y comprobamos en ellos algún motivo de ruina, entonces sí, subamos y hagámosle la guerra. (Judit 5, 20)

  • Que Dios te exalte para siempre, favoreciéndote con sus bienes. Porque no vacilaste en exponer tu vida, al ver la humillación de nuestro pueblo, sino que has conjurado nuestra ruina, procediendo resueltamente delante de nuestro Dios". Y todo el pueblo añadió: "¡Amén! ¡Amén!". (Judit 13, 20)

  • Y el rey, en un arrebato de ira, se retiró del banquete y fue hacia el jardín del palacio. Mientras tanto, Amán se quedó para implorar por su vida a la reina Ester, porque veía que el rey ya había decidido su ruina. (Ester 7, 7)

  • Ellos se reunieron en sus respectivas ciudades, en todas las provincias del rey Asuero, para atacar a los que buscaban su ruina. Nadie les opuso resistencia, porque el temor a los judíos se había apoderado de todos los pueblos. (Ester 9, 2)

  • No entregues tu cetro, Señor, a los que no son nada: ¡que no se burlen de nuestra ruina! Haz que sus planes se vuelvan contra ellos e inflige un castigo ejemplar a aquel que comenzó a atacarnos. (Ester 14, 11)

  • Anda errante como pasto de los buitres y sabe que su ruina es segura. El día tenebroso (Job 15, 23)

  • Su vigor se convierte en hambre y la ruina permanece a su lado; (Job 18, 12)

  • ¿Cuántas veces se extingue su lámpara y la ruina se abate sobre ellos? ¿Cuántas veces en su ira él les da su merecido, (Job 21, 17)

  • que el impío es preservado en el día de la ruina y es puesto a salvo en el día del furor? (Job 21, 30)


“Agradeça sempre ao Pai eterno por sua infinita misericórdia”. São Padre Pio de Pietrelcina