Encontrados 27 resultados para: Rechazado

  • Córtate la cabellera y arrójala, entona un canto fúnebre sobre los montes desolados, porque el Señor ha desechado y rechazado a la generación que provocó su ira. (Jeremías 7, 29)

  • He abandonado mi casa, he rechazado mi herencia, he entregado lo que más quería al poder de sus enemigos. (Jeremías 12, 7)

  • ¿Has rechazado del todo a Judá? ¿Estás disgustado con Sión? ¿Por qué nos has herido sin remedio? Se esperaba la paz, ¡y no hay nada bueno...! el tiempo de la curación, ¡y sobrevino el espanto! (Jeremías 14, 19)

  • ¿No ves lo que dice esta gente: "A las dos familias que había elegido, el Señor las ha rechazado"? Así desprecian a mi pueblo, y ya no lo consideran una nación. (Jeremías 33, 24)

  • por todo eso, yo lo puse en manos de un jefe de naciones, que lo tratará conforme a su maldad. Yo lo he rechazado, (Ezequiel 31, 11)

  • Mi pueblo perece por falta de conocimiento. Porque tú has rechazado el conocimiento, yo te rechazaré de mi sacerdocio; porque has olvidado la instrucción de tu Dios, también yo me olvidaré de tus hijos. (Oseas 4, 6)

  • Pero Israel ha rechazado el bien: el enemigo lo perseguirá. (Oseas 8, 3)

  • Yo fortificaré a la casa de Judá y salvaré a la casa de José. Los restableceré porque tendré piedad de ellos, y serán como si yo no los hubiera rechazado, porque yo soy el Señor, su Dios, y los escucharé. (Zacarías 10, 6)

  • Y comenzó a enseñarles que el Hijo del hombre debía sufrir mucho y ser rechazado por los ancianos, los sumos sacerdotes y los escribas; que debía ser condenado a muerte y resucitar después de tres días; (Marcos 8, 31)

  • «El Hijo del hombre, les dijo, debe sufrir mucho, ser rechazado por los ancianos, los sumos sacerdotes y los escribas, ser condenado a muerte y resucitar al tercer día». (Lucas 9, 22)

  • Pero antes tendrá que sufrir mucho y será rechazado por esta generación. (Lucas 17, 25)

  • Él es la piedraque ustedes, los constructores, han rechazado, y ha llegado a ser la piedra angular. (Hechos 4, 11)


“Para que se preocupar com o caminho pelo qual Jesus quer que você chegue à pátria celeste – pelo deserto ou pelo campo – quando tanto por um como por outro se chegará da mesma forma à beatitude eterna?” São Padre Pio de Pietrelcina