Encontrados 27 resultados para: Depósitos
Porque en esos depósitos los israelitas y los hijos de Leví colocarán las ofrendas de trigo, de vino nuevo y aceite fresco. Allí están también los utensilios del Santuario, los sacerdotes que prestan servicio, los porteros y los cantores. Así no descuidaremos la Casa de nuestro Dios. (Nehemías 10, 40)
Matanías, Bacbuquías, Abdías, Mesulám, Talmón y Acub eran porteros y hacían guardia en los depósitos que estaban junto a las puertas. (Nehemías 12, 25)
En aquel tiempo, se nombró a los encargados de los depósitos destinados a almacenar las contribuciones, las primicias y los diezmos, a fin de guardar las porciones asignadas por la Ley a los sacerdotes y levitas, las cuales provenían de los campos cercanos a las ciudades. Porque la gente de Judá estaba contenta con los sacerdotes y levitas que ejercían sus funciones. (Nehemías 12, 44)
Todo Judá trajo a los depósitos los diezmos del trigo, del vino nuevo y del aceite fresco; (Nehemías 13, 12)
y puse al frente de los depósitos al sacerdote Selemías, al escriba Sadoc, y a Pedaías, uno de los levitas, y como ayudante, a Janán, hijo de Zacur, hijo de Matanías, porque se los consideraba personas de confianza. Ellos eran los encargados de distribuir las porciones entre sus hermanos. (Nehemías 13, 13)
Un destacamento de amonitas partió acompañado de cinco mil asirios. Ellos acamparon en el valle, y se apoderaron de los depósitos de agua y de los manantiales de los israelitas. (Judit 7, 17)
¿Has penetrado hasta los depósitos de la nieve y has visto las reservas del granizo, (Job 38, 22)
Levanta las nubes desde el horizonte, con los relámpagos provoca la lluvia, saca a los vientos de sus depósitos. (Salmos 135, 7)
También fortificó la ciudad de Betsur, Guéser y la Ciudadela, dejando en ellas tropas y depósitos de víveres. (I Macabeos 9, 52)
El Sumo Sacerdote le explicó que se trataba de unos depósitos pertenecientes a las viudas y a los huérfanos, (II Macabeos 3, 10)
Por su palabra, las aguas se detuvieron como una masa; por una de sus órdenes, se formaron los depósitos de agua. (Eclesiástico 39, 17)
Ezequías se alegró de esto, y mostró a los emisarios la sala del tesoro, la plata, el oro, los perfumes, el aceite precioso, su arsenal y todo lo que se encontraba en sus depósitos. De todo lo que había en su palacio y en sus dominios, no quedó nada que Ezequías no les hiciera ver. (Isaías 39, 2)