Encontrados 48 resultados para: Basta

  • Los hijos de José dijeron: "La montaña no nos basta, y en las llanuras todos los cananeos tienen carros de hierro, tanto los de Bet Seán y sus ciudades dependientes, como los de la llanura de Izreel". (Josué 17, 16)

  • Basta que teman al Señor y lo sirvan fielmente de todo corazón. Miren qué grandes cosas ha hecho el Señor con ustedes. (I Samuel 12, 24)

  • Entonces Samuel dijo a Saúl: "¡Basta! Voy a anunciarte lo que el Señor me dijo anoche". "Habla", replicó él. (I Samuel 15, 16)

  • Basta que nuestro señor lo diga, y los servidores que te asisten buscarán un hombre que sepa tocar la cítara. Así, cuando te asalte el mal espíritu de Dios, él tocará la cítara, y tú te sentirás aliviado". (I Samuel 16, 16)

  • El Ángel extendió la mano hacia Jerusalén para exterminarla, pero el Señor se arrepintió del mal que le infligía y dijo al Ángel que exterminaba al pueblo: "¡Basta ya! ¡Retira tu mano!". El Ángel del Señor estaba junto a la era de Arauná, el jebuseo. (II Samuel 24, 16)

  • Y después de haber reflexionado, el rey fabricó dos terneros de oro y dijo al pueblo: "¡Basta ya de subir a Jerusalén! Aquí está tu Dios, Israel, el que te hizo subir del país de Egipto". (I Reyes 12, 28)

  • Luego caminó un día entero por el desierto, y al final se sentó bajo una retama. Entonces se deseó la muerte y exclamó: "¡Basta ya, Señor! ¡Quítame la vida, porque yo no valgo más que mis padres!". (I Reyes 19, 4)

  • Dios mandó un Ángel a Jerusalén para exterminarla; pero cuando la estaba exterminando, el Señor miró y se arrepintió del mal que le infligía, y dijo al Ángel exterminador: "¡Basta ya! ¡Retira tu mano!". El Ángel del Señor estaba junto a la era de Ornán, el jebuseo. (I Crónicas 21, 15)

  • En cuanto a la hiel, sirve para ungir los ojos afectados de manchas blancas: basta con soplar sobre esas manchas para que se curen". (Tobías 6, 9)

  • Quédate en tu campamento y reserva a todos los hombres de tu ejército; basta con que tus servidores se apoderen de la fuente que brota al pie de la montaña, (Judit 7, 12)

  • No les basta con suprimir los sentimientos de gratitud entre los hombres, sino que, exaltados por los aplausos de los que ignoran el bien, se imaginan que escaparán a Dios, que todo lo ve, y a su justicia, que detesta el mal. (Ester 16, 4)

  • ¿No te basta el consuelo que Dios te da y una palabra pronunciada con dulzura? (Job 15, 11)


“Combata vigorosamente, se está interessado em obter o prêmio destinado às almas fortes.” São Padre Pio de Pietrelcina