Encontrados 271 resultados para: Babilonia

  • Porque así habla el Señor: Yo haré que seas presa del terror, tú y todos tus amigos; ellos caerán bajo la espada de sus enemigos, y tú lo verás con tus propios ojos. Y yo entregaré a todo Judá en manos del rey de Babilonia, que los deportará a Babilonia y los herirá con la espada. (Jeremías 20, 4)

  • Todas las riquezas de esta ciudad, todas sus ganancias y todo lo que hay de precioso en ella, junto con todos los tesoros de los reyes de Judá, los entregaré en manos de sus enemigos: ellos los saquearán, los tomarán y se los llevarán a Babilonia. (Jeremías 20, 5)

  • En cuanto a ti, Pasjur, tú y todos los que habitan en tu casa irán al cautiverio: llegarás a Babilonia y allí morirás, y allí serás enterrado, tú y todos tus amigos a quienes les has profetizado falsamente". (Jeremías 20, 6)

  • "Por favor, consulta al Señor por nosotros, ya que Nabucodonosor, rey de Babilonia, nos hace la guerra. Tal vez el Señor renueve por nosotros todas sus maravillas, y lo fuerce a retirarse". (Jeremías 21, 2)

  • Así habla el Señor, el Dios de Israel: Yo haré retroceder las armas de guerra que ustedes empuñan, con las que combaten al rey de Babilonia y a los caldeos que los asedian desde fuera de los muros, y las amontonaré en medio de esta ciudad. (Jeremías 21, 4)

  • Después de esto -oráculo del Señor- entregaré a Sedecías, rey de Judá, a sus servidores y a la población que aún quede en esta ciudad después de la peste, de la espada y el hambre; los entregaré en manos de Nabucodonosor, rey de Babilonia, en manos de sus enemigos y en manos de los que atentan contra su vida: él los pasará al filo de la espada, sin piedad, sin clemencia y sin compasión". (Jeremías 21, 7)

  • Porque yo he vuelto mi rostro hacia esta ciudad para mal y no para bien -oráculo del Señor-: ella será entregada en manos del rey de Babilonia, que la hará arder por el fuego". (Jeremías 21, 10)

  • Yo te entregaré en manos de los que atentan contra tu vida, en manos de los que tú más temes, en manos de Nabucodonosor, rey de Babilonia, y en manos de los caldeos. (Jeremías 22, 25)

  • El Señor me hizo ver dos canastas de higos, puestas delante del Templo del Señor. Esto sucedió después que Nabucodonosor, rey de Babilonia, deportó de Jerusalén a Jeconías, hijo de Joaquím, rey de Judá, así como también a los príncipes de Judá, a los artesanos y a los cerrajeros, y se los llevó a Babilonia. (Jeremías 24, 1)

  • Palabra que llegó a Jeremías acerca de todo el pueblo de Judá, el cuarto año de Joaquím, hijo de Josías, rey de Judá, es decir, el primer año de Nabucodonosor, rey de Babilonia. (Jeremías 25, 1)

  • yo mando a buscar todos los clanes del Norte -oráculo del Señor- y a Nabucodonosor, rey de Babilonia, mi servidor, y los hago venir contra este país, contra sus habitantes y contra todas estas naciones de alrededor. Así los consagraré al exterminio total, y los convertiré en una desolación, en un motivo de estupor y en ruinas perpetuas. (Jeremías 25, 9)

  • Todo este país será una ruina y una devastación, y esas naciones servirán al rey de Babilonia durante setenta años. (Jeremías 25, 11)


“Que Nossa Senhora nos obtenha o amor à cruz, aos sofrimentos e às dores.” São Padre Pio de Pietrelcina