Encontrados 29 resultados para: Apoyo

  • Luego palpó las dos columnas centrales que sostenían el edificio, y se apoyó contra ellas, poniendo sobre una su brazo derecho y sobre la otra su brazo izquierdo. (Jueces 16, 29)

  • Él te reconfortará y será tu apoyo en la vejez, porque te lo ha engendrado tu nuera que te quiere tanto y que vale para ti más que siete hijos". (Rut 4, 15)

  • Ellos me enfrentaron en un día nefasto, pero el Señor fue mi apoyo: (II Samuel 22, 19)

  • Adonías mantuvo conversaciones con Joab, hijo de Sarvia, y con el sacerdote Ebiatar, que le prestaron su apoyo. (I Reyes 1, 7)

  • ¡Ah, sí! Tú confías en el apoyo de esa caña quebrada, en Egipto, que perfora y atraviesa la mano de todo el que se apoya en él. Eso es el Faraón, rey de Egipto, para todos los que confían en él. (II Reyes 18, 21)

  • En ese tiempo, el faraón Necao, rey de Egipto, subió en apoyo del rey de Asiria, hacia el río Éufrates. El rey Jo-sías le salió al paso, pero Necao le dio muerte en Meguido, apenas lo divisó. (II Reyes 23, 29)

  • Y se entregaron los decretos del rey a los sátrapas y gobernadores de la región de este lado del Éufrates, los cuales prestaron su apoyo al pueblo y a la Casa de Dios. (Esdras 8, 36)

  • Tú creaste a Adán e hiciste a Eva, su mujer, para que le sirviera de ayuda y de apoyo, y de ellos dos nació el género humano. Tú mismo dijiste: ‘No conviene que el hombre esté solo. Hagámosle una ayuda semejante a él’. (Tobías 8, 6)

  • Pero los habitantes de todas esas regiones, sin excepción, despreciaron el llamado de Nabucodonosor, rey de los asirios, y no se aliaron con él para la guerra, porque no le temían, sino que lo consideraban como un hombre falto de apoyo. Por eso despidieron despectivamente a sus emisarios con las manos vacías. (Judit 1, 11)

  • Porque tu fuerza no está en el número ni tu dominio en los fuertes, sino que tú eres el Dios de los humildes, el defensor de los desvalidos, el apoyo de los débiles, el refugio de los abandonados y el salvador de los desesperados. (Judit 9, 11)

  • Todos los jefes de las provincias, los prefectos, los gobernadores y los funcionarios del rey les prestaron su apoyo, porque el temor a Mardoqueo se había apoderado de ellos, (Ester 9, 3)

  • y se apoyó delicadamente sobre una de ellas, (Ester 15, 6)


“Não se fixe voluntariamente naquilo que o inimigo da alma lhe apresenta.” São Padre Pio de Pietrelcina