Encontrados 43 resultados para: tuya

  • Tuyos son los cielos, tuya es la tierra, el mundo y su contenido tú lo fundaste. (Salmos 89, 12)

  • «¿Serás tú el único que te resistes a nuestra autoridad, y por culpa tuya se burlarán de mí? ¿Por qué te opones a nuestra autoridad en tus cerros? (1 Macabeos 10, 70)

  • Tienen a un poderoso defensor, Yavé mismo, quien asumirá su causa en contra tuya. (Proverbios 23, 11)

  • Me robaste el corazón, hermana mía, novia mía, me robaste el corazón con una sola mirada tuya, con una sola de las perlas de tu collar. (Cantar 4, 9)

  • A una orden tuya, toda la creación, con sus propiedades naturales, se renovó desde arriba para proteger a tus hijos. (Sabiduría 19, 6)

  • Entonces te hará muecas y aplaudirá; hará bromas a costa tuya y mostrará su verdadera cara. (Sirácides (Eclesiástico) 12, 18)

  • Piensa que los demás están en la misma situación tuya, actúa en todo con reflexión. (Sirácides (Eclesiástico) 31, 15)

  • Busca más bien la compañía de un verdadero creyente, que tú sepas que es respetuoso de los mandamientos, cuya alma está cerca de la tuya y que compartirá tu sufrimiento si tú fracasas. (Sirácides (Eclesiástico) 37, 12)

  • yo, a mi vez, reuniré a todos tus amantes con los que te calentaste, a los que querías y a los que aborrecías; los reuniré en contra tuya de todas partes y ante ellos descubriré tu desnudez: te verán privada de todo. (Ezequiel 16, 37)

  • Por eso, Oholiba, esto dice Yavé: Voy a azuzar en contra tuya a tus amantes de los cuales se apartó tu corazón; los reuniré en tu contra de todas partes. (Ezequiel 23, 22)

  • Pues bien, por eso, levanto mi mano en contra tuya; te convertirás en pasto de las naciones, haré que desaparezcas de entre los pueblos y ya no serás más un país. Entonces sabrás que yo soy Yavé. (Ezequiel 25, 7)

  • Le dirás esta palabra de Yavé: Me lanzaré contra ti, Sidón, y me cubriré de gloria a costa tuya. Sabrán que yo soy Yavé cuando ejecute mis decisiones: entonces conocerán mi santidad. (Ezequiel 28, 22)


“O homem sem Deus é um ser mutilado”. São Padre Pio de Pietrelcina